Prince, el hermano rebelde de los Boateng

Boateng, el fan de Rivaldo y Michael Jackson

Lleva tres goles en cinco partidos de Champions (ocho en 18 partidos en esta temporada) y confiesa que el más importante de su vida es el que le marcó al Barça en la fase de grupos

J.M. Díaz

Kevin Prince Boateng tiene toda una historia tras de sí a sus 25 años. De origen ghanés y con pasaporte alemán, acabó enfrentándose en el Mundial de Sudáfrica a su medio hermano Jerome, el defensa central del Bayern de Múnich e internacional por Alemania, después de que el ahora mediapunta del Milan fuera expulsado del combinado teutón en edad sub¿21 por motivos disciplinarios.

Más allá de sus asuntos de pasaporte, Kevin, que adorna su camiseta con el 27 y el nombre de 'Prince¿, se reconocía en una entrevista a 'uefa.com¿ fan de Michael Jackson “que está siempre presente en mi vida”. De hecho llegó a disfrazarse con la estética del desaparecido artista norteamericano en una celebración de títulos. “Es el mejor cantante, compositor y bailarín que nunca ha existido”, afirma. También admira a Edson Arantes do Nascimento, Pelé, “un referente porque es negro y marca muchos goles” y al ex blaugrana Rivaldo “porque mi estilo de juego es muy similar al suyo”.

En un Milan que cuenta con Zlatan Ibrahimovic como gran referente ofensivo, dos malabaristas como Robinho y Pato Alexandre como ayudantes de campo en ausencia del convaleciente Antonio Cassano, y una revelación como El Shaarawy, Boateng se ha revelado como el enlace necesario entre el entramado defensivo de Massimiliano Allegri y los peligrosos estiletes de la punta de ataque.

“No tengo miedo a nadie, tendremos que hacer nuestro partido sin pensar en el rival”, reflexionaba Prince Boateng, aunque también confesaba que “hubiera preferido no jugar frente al Barça o el Real Madrid, pero si queremos ganar la Champions habrá que enfrentarse a todos, tarde o temprano”. Además, recuerda con orgullo que “el gol que le marqué al Barça” en el duelo de la fase de grupos en San Siro “es el más importante de mi vida. Superé a Abidal y chuté”.

Temperamental, especial -tiene el cuerpo repleto de tatuajes- explica que el fútbol le viene de familia “por mi padre, mi madre y mis hermanos”, especialmente su hermano mayor “que me presionaba para que llegara a donde él no pudo hacerlo”. Queda claro que lo consiguió.