SEXTO SENTIDO

Los intermediarios

Jorge Mendes es el representante de Cristiano Ronaldo, entre muchos otros jugadores

Jorge Mendes es el representante de Cristiano Ronaldo, entre muchos otros jugadores / sport

Carme Barceló

No son un grupo musical pero afinan en sus actuaciones casi a la perfección. No contabilizan miles de seguidores pero sus clientes los cuentan por millones. No son líderes de opinión ni tampoco mediáticos pero si absolutamente influyentes. Los intermediarios de futbolistas. Los agentes. Esos seres estacionales y casi transparentes para muchos que opacan operaciones y translucen lo que les interesa. Han pasado de negociar entre manteles horas y horas, con el puro en la boca y los apuntes en la servilleta a construir imperios empresariales plagados de carreras universitarias y másters diversos. Y el Balón de Oro de esta liga de representantes, Jorge Mendes, le ha metido un golazo a Florentino Pérez en su propia área con los derechos de imagen de Cristiano. Peter Lim, dueño y señor del Valencia, va a compartirlos con el Real Madrid y se queda con el 60% para potenciar la imagen del portugués en Asia. Como diría el entrañable ‘papuchi’ de Julio Iglesias, todo suena raro, raro, raro. Esta alianza que ha emocionado tanto a Ronaldo, según sus propias palabras, es una bomba de relojería. Porque Lim va a trabajar para que la imagen de CR7 suba enteros a la par que se va a enfrentar como máximo accionista del Valencia a su propia estrella, a la que uno de sus jugadores puede lesionar, por poner un ejemplo. Mendes se frota las manos con la gestión como Mino Raiola, el agente de Pogba y la antítesis absoluta del agente portugués, se frota las suyas. Hombre de carácter y modus operandi peculiar, tiene un especial afecto a Laporta. El fichaje de Ibrahimovich, otro de sus representados, le supuso al Barça que él presidía un pago anual a Raiola de un millón de euros, que siguió cobrando tras la marcha del delantero. Para sus jugadores, es como un padre. Es el intermediario que parece vivir en el salón de la casa de su cliente. Como para Sergio Ramos es René, su hermano/agente/Pepito Grillo, o su madre, portavoz de sus deseos desde la ventanilla de un coche. Otras formas para idéntico fondo.