La prueba de fidelidad de Donnarumma

Donnarumma envió un gesto contundente a la grada

Donnarumma envió un gesto contundente a la grada / AFP

Mar Bianchi

Mar Bianchi

El pasado viernes, en el Juventus Stadium, Gigio Donnarumma volvió a demostrar su enorme calidad. Su actuación en el terreno de juego fue monstruosa y, si el marcador se mantuvo 1-1 hasta el minuto 94 fue, en gran medida, gracias a las paradas decisivas del guardameta de 18 años. No obstante, el penalti por mano de De Sciglio pitado al borde del pitido final y que Dybala anotó, tomándose la revancha de tiro que falló en la Supercoppa Italia, lo sacó de sus casillas.

Mientras se marchaba al vestuario, la rabia del arquero se transformó en un gesto de amor: se besó el escudo ‘rossonero’ durante varios segundos. Acto seguido, comenzó a gritar, sus labios podían leerse con bastante facilidad: "¡No es posible, siempre para ellos!". Esta prueba de estima y fidelidad hacen que la afición del Milan deje a un lado la opción, no descartable, de que Gigio abandone el club.

Asimismo, tanto el beso como las palabras que exclamó pueden esconder otro mensaje: Donnarumma, que quizá es la primera opción de la 'Vecchia Signora' para sustituir a Buffon, se aleja del conjunto 'bianconero' de Turín. Aunque nunca hay que olvidar que el representante de Gigio es Mino Raiola y que, hace poco, el propio agente afirmó que el portero merece estar en un equipo grande