La Juve supera (2-0) al Lazio con goles de Higuaín y Dybala

Dybala abrió el marcador en el cómodo triunfo de la Juve

Dybala abrió el marcador en el cómodo triunfo de la Juve / AFP

Mar Bianchi

La Juve no tuvo problemas para imponerse al Lazio (2-0) con tempraneros goles de Dybala e Higuaín en un encuentro que pudo acabar en goleada del equipo de Massimiliano Allegri.

A grandes males, grandes remedios. Algo así debió pensar Allegri después de la derrota en casa de la Fiorentina. Los ‘bianconeri’ no querían ceder ni un punto más y, en el fortín del Juventus Stadium, sorprendieron con una alineación muy ofensiva: Dybala, Higuaín y Mandzukic juntos en el césped.

En fase ofensiva, el 4-3-3 de la ‘Vecchia Signora’ se convertía en 4-2-3-1, sumando a Cuadrado en la línea de ataque. Dinamita pura para la defensa ‘laziale’, en la que se encontraba Patric, canterano culé que, proveniente del Barça B, en julio de 2015 comenzó su andadura en el calcio.

Con tanta potencia arriba, el gol de la Juventus no tardó en llegar. En el minuto cinco, Dybala en modo ‘trequartista’ inició la jugada que él mismo acabaría con gol, una gran volea que Marchetti casi ni vio. Diez minutos después, Cuadrado desde la banda derecha puso un bola perfecta, Higuaín solo tenía que empujarla y así convirtió el 2-0. Gracias a este tanto, el ‘Pipa’ ya lleva una racha de cinco partidos consecutivos anotando.

La Lazio, prácticamente desaparecida, tuvo alguna ocasión de Immobile, Felipe Anderson o Milinkovic Savic, pero siempre se topaban con el muro de Chiellini y Bonucci. Los locales continuaban a lo suyo y es de especial mención la asociación entre Lichtsteiner y Cuadrado en la banda derecha, ambos rápidos y concisos en los pases. Dybala buscaba aumentar distancias y asistió a Higuaín, pero el gol quedó anulado por fuera de juego.

Misma tónica en la segunda mitad del encuentro. ‘La Joya’ de Allegri continuaba creando ocasiones, algunas no llegaron a la línea de gol por escasos centímetros. Respondió la Lazio con disparos de Milinkovic-Savic o Parolo, siempre desviados por la defensa de la juventina.

Los futbolistas ‘bianconeri’ pasaban a ser todos campistas: Bonucci llegaba al área rival para intentar rematar y Mandzukic colaboraba en defensa cerrando espacios. Con el partido dormido y al borde del final, la última acción fue para Pjaca que llevaba en campo poco más de cuatro minutos.