Diego López, en la silla eléctrica del Palermo

Diego López, técnico uruguayo de 42 años, es desde el pasado jueves entrenador del Palermo, en sustitución de Eugenio Corini, que presentó su dimisión tras caer derrotado ante el Inter de Milán.

Hasta ahí nada extraordinario, sino hasta cierto punto habitual en el mundo del fútbol. Lo que realmente es excepcional es que Diego López se convirtió en el cuarto entrenador del Palermo esta temporada, en el duodécimo en dos cursos -la temporada anterior el Palermo quemó hasta ocho entrenadores- y en el 39º técnico del equipo siciliano desde que Maurizio Zamparini se hizo con la propiedad del club hace ahora catorce años y medio, en verano de 2002.

Unas cifras realmente inverosímiles pero absolutamente ciertas. El banquillo del Palermo se ha convertido en una auténtica silla eléctrica para sus ocupantes con Zamparini al frente del club, que tiene un promedio de casi 2,8 entrenadores por temporada. Y Diego López no lo va a tener mejor que sus predecesores. El uruguayo toma las riendas del equipo, situado como penúltimo en la tabla, a 11 puntos de la permanencia y habiendo conseguido tan solo dos victorias en 21 partidos este curso.

Diego López dirigió con anterioridad al Cagliari y al Bolonia y como futbolista jugó también en la liga española durante dos temporadas, en las filas del Racing de Santander. Sus predecesores esta temporada en el banco siciliano han sido Davide Ballardini, Roberto de Zerbi y Eugenio Corini.