Un mordisco para la historia

Tyson vs Holyfield

Tyson mordió a Holyfield en las dos orejas / sport

Sergi Mejías

Sergi Mejías

MGM Grand de Las Vegas, 28 de junio de 1997. Evander Holyfield y Mike Tyson iban a pelear por el título de los pesos pesados. Era la revancha. Meses antes antes Tyson había perdido ante Holyfield por nocaut técnico en el en último asalto. Pero ‘Ironman’ no dejó de reclamar que su rival le había dado cabezados aunque el árbitro no lo tuvo en cuenta. La semilla de odio había arraigado en el que fuera el campeón más joven de los pesos pesados.

Tyson luchaba por el título sin haber peleado en los últimos cuatro años después de pasar tres años en la cárcel por violación. Mike quería recuperar el título siete años después de perderlo. Y falló en la primera intentona. En la revancha, a los siete meses, repitieron escenario pero no árbitro por Tyson lo vetó.

Empezó el combate y el campeón fue sancionado en el segundo asalto por dar esos cabezazos que tanto le gustaban. Y abrió la ceja de su rival. En el tercero todo se torció. Se abrió la puerta del infierno y Tyson cayó al abismo cuando mordió, no una si no en dos ocasiones a Holyfield. En la primera mordió la oreja derecha y fue sancionado. Pero en la reanudación aprovechó otro abrazo para volver a moder, esta vez en la izquierda. Sonó la campana del final de tercer asalto y Mike fue descalificado. Tyson iba camino del averno montado en unas imágenes que dieron la vuelta al mundo y serán recordadas hasta el fin de nuestros días. 

Tyson era pura ira y quiso ir a por Holyfield aunque el combate hubiese terminado. Perdió la licencia y tuvo que pagar tres millones de dólares de sanción. No fue su fin. Después volvió a pelear e incluso recuperó el título aunque se retiró en 2005. Así y todo, su comportamiento ni tenía ni explicación ni justificación. 

Fue hace siete años cuando el propio púgil confesó que disputó ese combate drogado, hasta arriba de cocaína. Y Holyfield, por su parte, aseguró que lo había perdonado con el paso del tiempo y que tenían una buena relación con quien fue su rival en el cuadrilatero.

Y buena muestra de esa relación es que este escandaloso episodio entre Tyson y Holyfield volvió a las pantallas muchos año después. Fue en un anuncio de una conocida cadena de material deportivo en la Mike ‘le devolvía’ el trozo de la oreja que le arrancó a Evander de un mordisco, un mordisco que entró lamentablemente en la historia hace ya 20 años.