Yerry Mina se quedará en el Palmeiras hasta el Mundial de Rusia

Yerry Mina, objetivo blaugrana pra reforzar la defensa

Yerry MIna, objetivo blaugran para reforzar la defensa / sport

Joaquim Piera

Yerry Mina ha dado un paso más hacia el Camp Nou, aunque todo apunta que la incorporación definitiva podría posponerse hasta el verano de 2018, después de la disputa del Mundial de Rusia. Una opción, que el jugador colombiano y su entorno no ven con malos ojos.

Este es el acuerdo al que han llegado el Barça con el presidente del Palmeiras, Mauricio Galiotte y el director deportivo, Alexandre Mattos, que han estado estos últimos días en la capital catalana, y que siguen ahora con su viaje europeo. 

Los dirigentes del Verdao andaban preocupados ante la posibilidad que el Barça efectuase en junio la opción de compra del jugador colombiano, tasada en 9 millones de euros, cuando empieza, precisamente, la fase decisiva de la Copa Libertadores de Amèrica. La intención del Palmeiras era contar con el central durante todo el 2017 y alargar su presencia hasta mediados de 2018, cuando completarìa dos años en el club. 

El Barça no quiere perjudicar un club con el cual mantiene una excelente relación, como demuestra el hecho que Galiotte y Mattos se desplazaran a París con la expediciòn oficial blaugrana para ver in situ el fatídico 4-0 contra el PSG.

Cuando el Barça se hizo con el derecho preferencial de Mina la Libertadores acababa en julio, y su extensión hasta noviembre ha abierto un nuevo escenario. 

El Barcelona se ha mostrado comprensible con el Palmeiras. Eso sì, se dejó una puerta abierta, a que Yerry ya pueda llegar en verano, dependiendo del calado de la renovación que se haga de la plantilla blaugrana. Algo, ahora mismo imprevisible, porque la temporada aún está en juego. 

La opción que el central se incorpore en enero de 2018, una vez haya finalizado la temporada brasileña, está absolutamente descartada, porque el calendario del mes de enero, con la disputa de las eliminatorias de la Copa del Rey, impedirían realizar un buen proceso de adaptación.

Yerry<strong> </strong>esperará al Barça. Su deseo es jugar en el Camp Nou, y lo único que pedirá al Barcelona es que formalice su intención de contratarlo, lo que es muy habitual en este tipo de operaciones. 

Lo que ni el jugador ni su entorno familiar quieren es ruido y especulaciones periodísticas que lo coloquen en medio de polémicas mediáticas artificiales y que acaben entubiando su magnífica relación con la temperamental 'torcida' palmeirense.

El zaguero cafetero está feliz en Sao Paulo donde se siente valorado, como quedó claro en la reciente mejora de su contrato firmada precisamente antes del viaje del presidente del Verdao a Catalunya. Sabe que sus opciones de vestirse de blaugrana pasan obligatoriamente por seguir creciendo en el Palmeiras, como ha hecho hasta ahora.