Aunque primero quiere hablar con Luis Enrique

Xavi tiene una oferta de Catar

El Al Saad le ofrece cuatro temporadas a razón de diez millones de euros limpios, pero él prioriza el Barcelona

Javier Miguel

Xavi Hernández está viviendo estos días intentando aislarse en la medida de lo posible de todos los rumores y especulaciones que giran entorno a su futuro. Desde que Luis Enrique, en su presentación como entrenador del Barcelona, dejara en el aire el futuro del egarense, aplazándolo todo a una reunión “para saber que él quiere y exponerle lo que queremos de él”, los rumores sobre una posible salida del internacional se han disparado exponencialmente.

Las palabras de Luis Enrique no han caído en saco roto y varios clubs han recogido el guante ante la incertidumbre que planteó el técnico asturiano. El primero en mover ficha fue el director general del Manchester City,  Ferran Soriano, que le ofreció tres temporadas para jugar en su franquicia en la MLS, el New York City, y poco después fueron los árabes del club catarí, Al Saad, quienes le pusieron en la mesa a una oferta irrechazable por cuatro temporadas.

En cualquier caso, Xavi ha pedido un poco de tiempo, dejando todo en ‘stand by’, ya que primero quiere disfrutar de su último Mundial con la selección y después reunirse con Luis Enrique para conocer de primera mano las intenciones del entrenador.

Xavi quiere seguir un año más en el Barcelona y así se lo dirá al nuevo entrenador. Sin embargo, no está dispuesto a quedarse como un capitán ‘florero’ que no tenga un rol importante en el equipo. No quiere prebendas, pero tampoco partir con un rol secundario. 

Así pues, tras los argumentos que le ofrezca Luis Enrique –lo cierto es que las sensaciones a día de hoy no son muy positivas–, será Xavi quien tome una decisión, ya que el jugador aún cuenta con dos años más de contrato.

En cualquier caso, el egarense entre la oferta del New York City y la de Al Saad, prefiere la catarí. Y no solo porque económicamente es mucho más interesante –se habla de casi diez millones de euros limpios de polvo y paja por año– sino porque no tendría el engorro de coger un avión cada dos semanas para jugar un partido de fútbol como sí le obligaría si jugara en Estados Unidos. Además, el Catar le ofrecen una serie de ventajas como la posibilidad de formarse como entrenador ejerciendo de técnico en las categorías inferiores del club catarí. Y otra ventaja más de la Liga catarí es que solo dura seis meses. 

Pero sería capaz de rechazar todo esto si siente que Luis Enrique confía en él.