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Xavi: "Mi tiempo ha pasado"

Xavi deja detrás suyo una historia gloriosa con 25 títulos y 767 partidos jugados. Su leyenda permanecerá por los siglos de los siglos. SPORT fue notario privilegiado de sus últimas palabras como jugador del FC Barcelona

Xavi: "Mi tiempo ha pasado"

Xavi: "Mi tiempo ha pasado" / sport

Javier Miguel

Usted empieza una nueva vida en Catar. Lo que está claro es que en el día de la presentación no podrá utilizar el tópico que recurren la mayoría de futbolistas en plan ‘desde que era pequeño había soñado con jugar en El-Sadd’

¡Jajaja! Yo diré lo que siento de verdad. Es un proyecto familiar para formarnos en un futuro futbolístico, un cambio de vida excepcional, nos han tratado de maravilla, las instalaciones de Aspire son magníficas, hay proyecto deportivo muy bueno, quieren conseguir otra vez la Liga, la Liga de Campeones de Asia. Me ilusiona todo, seguir jugando al fútbol, seguir jugando a otro nivel, pero luego formarme en Aspire, la metodología del entrenador y del director deportivo.

¿No le hace un poco de repelús esto de vestir a partir de ahora de blanco?

Jajaja. Sí, es verdad. Ya me pusieron la bufanda cuando llegué y parecía un jugador de la Juventus. 

Oiga, y esto de que le podemos ver vistiendo la camiseta ‘bleu’ del PSG

No puedo. Ya dije que nunca me enfrentaría con el Barcelona. No quiero jugar en Europa. Sería una traición. Yo ya lo he hecho todo en Europa, no puedo lograr más cosas. Mi carrera en Europa ya está hecha. 

Hágame una cronología del proceso de decisión de dejar Barcelona e irse a Catar ¿Hubo un día en concreto que dijo ya está, la decisión está tomada?

Bueno, hace ya unos meses. En febrero ya empecé a planteármelo seriamente que había llegado el momento de tomar una decisión, ya no estaba participando tanto en el equipo y esperábamos ganar un título al menos aún. Esa era la situación. Yo lo sentía así. Si no, me hubiera quedado.

¿Bartomeu apretó lo suyo para que se quedara?

Mucho, la verdad. Hasta vino dos o tres veces a casa para ofrecerme la renovación, la última hece menos de un mes,  pero le dije ‘no Bartu, te lo agradezco mucho y lo valoro también que todavía pienses en mí, pero ya tengo 35 años y quiero disfrutar del fútbol de otra manera’. Estar en el Barça también es estresante, estás observado con una lupa en todo momento y llevo 17 años así, teniendo que competir, teniendo que ganar… Todo eso es muy estresante. 

Pero no había nada que hacer

No. Tengo una propuesta que es tres en uno: la familia, deporte y vida. 

Y además saliendo por la puerta grande

Sí, creo sinceramente que de una forma insuperable. Querido, amado, la gente agradecida. Era muy fuerte, en la rúa, la gente me daba las gracias y soy yo el que tiene que estar agradecido a todos ellos. Una pasada lo que he vivido estos días. Me lo llevaré para toda la vida.

¿Y con todas  esas muestras de cariño no se le abrió en ningún momento una grieta de duda sobre su decisión?

No. La decisión estaba ya tomada. Es ley de vida, tengo 35 años. La gente me ve para media horita, para diez minutos. Pero uno también tiene una dignidad futbolística. Ya asumí este año que no jugaría tanto, tirando de humildad y trabajo, pero otro año no tiene sentido, ya está el equipo hecho. Mi tiempo ya ha pasado, es normal, no se me caen los anillos por decirlo. Le ha pasado a todos los futbolistas y algunos con 30 o 32 años. Pues a mí me ha tocado con 35 años. Lo que he vivido este año es increíble, uno de los años más felices de mi carrera. 

Por cierto ¿a quién se le ocurre ponerse a levantar la Champions en la tercera fila y con Piqué delante?

Me dijo el de la UEFA que los jugadores delante y que yo me pusiera en una tarima, pero la tarima era de una altura ridícula.

Parecía que levitaba sola la ‘Orejona’.

Jajaja. Sí es verdad. Vi las imágenes y parece que vaya sola. Pero la verdad es que fue un momento mágico. Imagínate el último servicio al equipo y levanto la Champions. Éxtasis.

Hablando de la final de Berlín, ¿qué le dijo a Pirlo cuando acabó el partido?

¿Qué iba a hacer? Estaba destrozado, estaba fatal, hundido. Le dí ánimos y le abracé.

¿Es verdad que Ozil fue a la fiesta del equipo en Berlín?

Yo no lo ví. Yo estaba con la familia y con mis amigos. A las tres me fui a dormir y poco más. 

Ya que estamos analizando su actuación tras la final, en la rúa con el autocar descubierto tuvo un rifi rafe con Alves y Neymar, ¿se acuerda?

Me estaban intentado quitar los zapatos y empujándome cuando estaba subido al borde del autobús. Yo les dije que dejaran de hacer tonterías y que estuvieran por la gente que para eso es una rúa. Está bien llevar tres o cuatro cervezas, pero la rúa es para la gente y para darles las gracias y no puede ser que pases de todo y vayas a tu bola.

Y en los discursos en el Camp Nou a más de uno se le trababa la lengua

No, mira, esto sí tiene una explicación y ya lo dijo Luis Enrique en su discurso. Había eco de dos segundos y te escuchabas a ti mismo mientras hablabas. No era efecto del alcohol. De hecho, en esta rúa no bebí apenas nada comparado con otras rúas. Me pasé toda la rúa detrás y disfrutando de la gente, grabándolo todo en mi memoria, porque era la última rúa.

¿La rúa que se ha sentido más querido?

No eso no. La que me he sentido más protagonista sí. El speaker iba diciendo cada minuto: ‘¡Recordad que es la despedida de Xavi!’ Y claro así todo el trayecto.

¿Y el recuerdo de Kevin Roldán de Piqué?

¡Bah! Fue una broma. Ahora en Madrid están en modo derrota… Es la rivalidad, a lo mejor ellos de aquí a unos años nos ganan el triplete y tendremos que aguantarnos si nos cae alguna broma.

Es verdad que la temporada ha acabado como un cuento de hadas, pero me lo dice hace seis meses y más bien tenía tintes de cuento de terror.

En Egipto antes de acabar el año ya te dije que tenía la sensación que íbamos a ganar algún título este año. Veía que se estaba entrenando bien, que se cuidaban los detalles, que estábamos entrenando a tope. Estaba convencido que íbamos a ganar al menos la Liga.

Sí, es verdad que usted en Egipto me anunció un título, pero unas semanas después llegó la derrota de Anoeta y todo se precipitó hacia el abismo.

Cada año pasa dos o tres veces una cosa así. Porque era Messi, sí ¿qué pasa?

Hombre, que el mejor jugador de tu equipo se enfrente al entrenador no me parece tan normal.

Tampoco fue tan trascendente. Ahora imagínate que yo me peleo contigo en el vestuario. Vale muy bien, algo que tampoco es tan anormal, ha pasado toda la vida y seguirá pasando.

Hombre algo de bombero tuvo que hacer, no me lo negará.

Sí. Por mi experiencia, como la de Iniesta, Busquets…

¿Quién cedió más, Messi o Luis Enrique?

No se trata de ceder. Se trata de llegar a un acuerdo. De hablarlo entre todos y pensar solo en el equipo. ¿Quién quiere perder? Nadie. Todos estamos por un objetivo ¿no? Ganar, eso es lo que cuenta, aunque tú pienses que tu compañero es un gilipollas, que puede pasar, pero el objetivo de los dos al final es el mismo. ¿Si o no? El vuestro es vender periódicos, el mío es ganar. Si aunque piense que yo no haría lo que hace mi compañero, yo estoy con él.

¿Tendremos más situaciones similares el año que viene?

Pues dos o tres veces seguro va a pasar.

Pero no estará usted. 

Pues estarán otros. Y con la experiencia de lo que pasó el año pasado. No pasa nada, pasa en todos los lados. Hubo una discusión y punto…

Hombre, una discusión que acabó dejando en la cuneta al director deportivo

Eso no tiene nada que ver con la discusión. Fue un tema aparte, entre Bartomeu y Zubi. No por la derrota de Anoeta echaron a Zubi. Si te digo la verdad yo volví a ver el partido y tuvimos hasta siete ocasiones para ganar mínimo 1-3. Ni los jugadores  de la Real Sociedad se creían que habían ganado el partido.