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Toño de la Cruz: "Exportamos el sistema del Barça"

De regreso a Japón, Toño de la Cruz está al frente de la 'Technical Soccer School RAFA', donde imparte el 'modelo Barça' a las jóvenes generaciones del país asiático

Toño de la Cruz sigue trabajando en Japón

Toño de la Cruz sigue trabajando en Japón / sport

David Salinas

Otra vez en Japón...

Sí, la tercera experiencia ya. ¡Cómo pasa el tiempo! Estuve de segundo con Azkargorta en el Yokohama Marinos entre 1997 y 2000 y para impulsar una escuela de fútbol en Tokio en 2012.

¿En qué lugar se encuentra ahora?

En Iizuka, cerca de Fukuoka.

Y también al frente de una escuela de fútbol, ¿no?

Así es. Se trata de un centro privado (Technical Soccer School RAFA –Rexach Antonio Football Academy–) de nueva creación que acoge a chavales de entre 14 y 18 años con el objetivo de formar futbolistas.

¿El fútbol es el único objetivo?

No. Entrenamos por la mañana y por la tarde los chavales acuden a la escuela, en el mismo centro, donde se imparten clases de todas las materias.

Como en La Masia...

No exactamente, aunque tendría cierto paralelismo.

¿Ha exportado el modelo de juego del Barça a Japón?

Exporto los conocimientos adquiridos a lo largo de mi carrera, pero está claro que el modelo de juego del Barça es el que más domino. Y aquí se quiere aprender el tipo de juego que hace el Barcelona, por lo que basamos la enseñanza en él. 

¿El Barça es una referencia en todo el mundo?

Sin lugar a dudas. Aquí hay una locura enorme por aprender su sistema de juego. Se sigue mucho al Barcelona en Japón y los chavales que empiezan están muy ilusionados en adquirir este exitoso sistema.

¿A qué jugador admiran más los chavales?

Preguntan por Messi, Neymar, Iniesta... Quieren parecerse a ellos. De todas formas, lo que inculcamos a los chicos es que entiendan el juego. Que los movimientos en el campo tienen una razón de ser, un fin. Esa es la clave.

¿Vislumbra ya futuras estrellas?

Ya se verá. Hay que ir paso a paso. Trabajamos para curtirlos, para que lleguen al campeonato japonés o puedan hacer pruebas en clubs europeos.

¿Cómo es la vida en Japón?

Estoy con mi mujer y nuestros hijos nos visitan de vez en cuando. Llegué en mayo y la verdad es que estoy muy contento de poder transmitir mis conocimientos a los chavales. Además, aquí nos tratan muy bien.

Su pasión por el fútbol es ilimitada...

No sé estar parado. Estoy encantado con mi trabajo.

¿Hasta cuándo tiene contrato?

Firmé por dos años y si ninguna de las partes manifiesta lo contrario, se prorroga año a año. 

¿Seguirá?

Sí. Esto me gusta. Y la dirección está muy contenta, como los chavales, que están encantados de trabajar como lo hacen los jugadores del FC Barcelona. La verdad es que nos acercamos bastante a lo que se hace hoy en día en la Ciudad Deportiva Joan Gamper.

¿No echa de menos la competitividad?

Es una parte muy atractiva del fútbol y, por esta razón, estamos pensando en formar un equipo competitivo y hacer un stage en Barcelona para jugar partidos allí y ver qué nivel tenemos.

Usted fue un lateral difícil de superar. ¿Cómo se enseña a un chaval a frenar a Messi o Cristiano Ronaldo?

Primero que traten de alejarlos de la portería, forzarlos a entrar por fuera, nunca por el centro. Y cuando llegue el momento de frenarlos tener claro que vas a robar el balón... O hacer falta para que no siga progresando, para que no finalice la acción.

¿Irá a ver al Barça en Yokohama en diciembre?

Haré todo lo posible para estar en el Mundial de Clubes, claro, pero dependerá de los compromisos que tenga con la escuela.

¿El Barça parte como favorito en Japón?

Sobre el papel, sí. Y es que el Barça nos ha acostumbrado tan mal... (risas). Y ahora, después de ganar tanto, se lo exigimos todo: resultados, juego de maravilla, buenos fichajes... Y hay que tener presente que el resto de equipos trabaja sin descanso para superarnos.