Todos quieren ser Sergio Busquets, el equilibrio del Barça

Con la renovacion de Sergio Busquets, el FC Barcelona se asegura la continuidad del futbolista que desde hace ocho temporadas da equilibrio al equipo más ofensivo de las últimas décadas. También, rompe una situación que no tenía sentido prolongar teniendo en cuenta la importancia del jugador y las tensiones que se habían generado.

La evolución del juego del Barça en este siglo XXI, que en sus mejores versiones es capaz de ser a la vez el conjunto más goleador, el más fuerte en el aspecto defensivo y el que mantiene una mayor posesión del balón, solo se entiende porque Busquets es la piedra angular de ese entramado táctico desde su posición de mediocentro, en realidad el inicio y final del rondo.

El sentido táctico de Sergio Busquets, combinado con ese bendito olfato de futbolista de barrio, convierten al jugador de Ciutat Badia (Sabadell, 16 de julio de 1988) en el primero del equipo a la hora de presionar al rival; también, en el mejor compinche de los interiores y los laterales con sus desplazamiento horizontales; e igualmente, el refuerzo necesario para los centrales.

Estas cualidades ya convertirían a 'Busi' en un mediocentro de primer nivel en cualquier club del mundo, pero no son suficientes para un sistema de juego como el del Barça, tan arriesgado porque sitúa muchos jugadores por delante del balón y casi siempre en campo contrario.

EL PLUS DE SERGIO BUSQUETS

Y aquí es donde aparece el 'plus' que aporta Busquets y que lo convierte en único para el 'estilo Barça': su juego se desarrolla siempre en función del balón. Ayudar a salir con la bola controlada a los centrales; colaborar en la construcción del juego en el centro del campo. Es decir, estar presente en todas las fases de juego. 

Algunos consideran que le falta un mayor peso específico en los últimos metros del juego; seguro que en su evolución, cuando sea necesario y dé un paso adelante sobre el terreno de juego, tendrá esa presencia que le reclaman.

Y el caso es que, pese a ser un futbolista de genunino 'adn Barça', Busquets no llegó al primer equipo desde las más remotas categorías inferiores ni se creó en La Masia, a la sombra del Camp Nou.  

Eso sí, su padre Carlos Busquets integró el Barça de Johan Cruyff como portero y Sergio mamó fútbol y Dream Team desde la cuna. En el Badia arrancó su pasión futbolera para pasar al Benjamín de la Unió de Fútbol  Barberá, después de no superar una primera prueba para el fútbol base blaugrana.

EL LARGO CAMINO AL CAMP NOU

Busquets se fue después al Cadete B de la Unió Esportiva Lleida cuando su padre fichó por el primer equipo del conjunto catalán y a continuación al Jàbac Can Jofresa de Terrassa.

Allí, a los 16 años, por fin le llegó el salto a la cantera del Barça cuando en el 2005 ingresó en el Juvenil. La combinación de sentido táctico, técnica e inteligencia de Sergio Busquets llama la atención de Frank Rijkaard en 2007. Frank, que había sido un excelente mediocentro en el Ajax y en el Milan detecta inmediatamente el talento innato del jugador de Ciutat Badia.

El 5 de junio, 'Busi' debuta con el primer equipo. Juega 18 minutos del Barça-Espanyol de la final de la Copa Catalunya. Aunque Sergio vuelve al Juvenil, ya nada será igual. Otro mediocentro que marcó época, Josep Guardiola, se hace cargo del filial en la temporada 20017-08 y le otorga los galones al frente del mediocampo del filial.

El filial sube a Segunda A, Josep Guardiola se hace cargo del primer equipo del FC Barcelona en la temporada 2008-09 y aunque Busquets empieza la temporada en el filial a las órdenes de Luis Enrique, en la segunda jornada de Liga (13 de septiembre), Pep lo convoca para el Barça-Racing. Busquets es titular, disputa todo el partido y se consolida en la primera plantilla.

El resto, es historia: el triplete, el sextete, otra Champions, otro triplete, el reciente póker incluido el séptimo doblete... Guardiola y el seleccionador Vicente del Bosque ven en Busquets un 'hijo predilecto', e incluso su actual entrenador Luis Enrique Martínez confesó que le gustaría reencarnarse en él como futbolista. Xavi Hernández lo proclamó abiertamente su heredero en el vestuario del Camp Nou. 

Sergio, discreto en sus declaraciones y agradecido a los que considera sus maestros, se convierte en el punto de equilibrio del mejor Barça de la historia y de la selección española campeona del Mundo y de Europa. Uno de los 'guardianes del estilo' junto a Andrés Iniesta, Gerard Piqué y Leo Messi.