FC Barcelona

Sergi Roberto, la entereza del chico para todo

Te contamos cómo Sergi Roberto ha pasado del ostracismo a ser la gran revelación del curso. Así explican en su entorno el carácter de un jugador capaz de ocupar siete posiciones en el Barça y salir reforzado

Las posiciones de Sergi Roberto con Luis Enrique

Las posiciones de Sergi Roberto con Luis Enrique / sport

DÍDAC PEYRET/JORDI GIL

"No tiene un carácter explosivo, pero tampoco es tan paciente como algunos creen. Cuando no jugaba se enfadaba mucho aunque no lo pareciese". Los que conocen bien a Sergi Roberto destacan lo resistente que puede llegar a ser a las adversidades. "Es un chico listo y una persona muy fuerte mentalmente", aseguran en su entorno.

Una cabeza "muy dura"

A partir de esa dureza mental se explica no solo su perseverancia -a pesar del ostracismo de los últimos años- sino también su adaptabilidad a (casi) cualquier posición. “Solo un jugador de una capacidad intelectual muy alta puede jugar a ese nivel de lateral como lo ha hecho Sergi Roberto", llegó a decir Luis Enrique

También se ha ganado el respeto de sus compañeros por la forma de afrontar las dificultades y estar listo para salir de la zona de confort. "Sergi Roberto es alguien que siempre está preparado. Y, para estar siempre preparado, tienes que tener la cabeza muy dura; ser fuerte. Los jugadores siempre nos excusamos con el entrandor cuando no nos toca jugar, o cuando vemos algo raro. Pero su mentalidad es estar siempre preparado. Nos sirve de ejemplo a todos", asegura <strong>Mascherano</strong>.

Polifacético: Siete posiciones

Frente al Athletic ocupó el lateral izquierdo, la séptima posición esta temporada. Y lo asumió con naturalidad. Ni siquiera Luis Enrique le dio instrucciones. "No me dio instrucciones porque fue un cambio durante el partido; como lateral me dio instrucciones cuando me tocó a la derecha, jugar por la izquierda es lo mismo que por la derecha, así que fue muy fácil". 

El canterano volvió a exhibir una capacidad camaleónica formidable. Curiosamente su explosión en el primer equipo comenzó como lateral derecho tras la lesión de Alves. Sustituyó al brasileño en San Mamés y dio un paso adelante. Este curso ya ha jugado en las tres posiciones del mediocampo, en los dos extremos, y en los dos laterales.

Pero hay más: en 2012 ocupó la posición de nueve mentiroso. "Toda mi vida jugué en el centro del campo; me he sentido muy cómodo de lateral y también de pivote, lo importante es jugar, sea donde sea y ayudar al equipo".

En todo esto proceso el reusense ha tratado de adaptarse a lo que cada posición requiiere: "En los entrenamientos me fijo en todos los compañeros por si me toca jugar en su posición. Es todo más fácil con estos jugadores", reconoce.

El verano que tuvo un pie fuera

El pasado verano lo tenía casi decidido: quería irse del Barcelona. Y eso que fue uno de los primeros en conocer las intenciones de Luis Enrique de renovar. Entonces el técnico le dijo que no se fuera, que contaba con él, y que pensaba darle minutos como lateral derecho. Finalmente se quedó, pero con la promesa de que si no tenía oportunidades se le darían facilidades para salir en el mes de enero, una vez cumplida la sanción de la FIFA.  

Finalmente se quedó y ahora vive su mejor momento. Al canterano le ha costado explotar a pesar de ser la comidilla de las inferiores (cuando tenía 17 años era el jugador que más gustaba a Guardiola y Tito). Se le acusaba  de falta de atrevimiento, pero en su temporada de explosión ha dado un paso adelante y se ha salido del libreto.