Recorrido vital por el barrio de Messi, en Rosario

Han pasado 16 años desde que Leo Messi abandonó Rosario para emprender su carrera de futbolista en Barcelona. Pero el paso del tiempo no ha alterado ni el amor del crack por sus amigos, su barrio, su ciudad. 

El barrio Las Heras, de Rosario en la zona del Sur de la ciudad, permanece inalterable. Allí, un 24 de junio de 1987, nació Lionel Andrés Messi Cuccittini, el mejor jugador del mundo, hincha de Newell’s Old Boys. Su casa sobre la calle Lavalleja 525, apenas se ha modificado. Tiene dos garajes más y una tercera entrada, llegando a la esquina de la calle Ayacucho. Y  desde hace ya varios años la calle está asfaltada. 

¿Lio vive en Barcelona, pero es como si nunca se hubiera ido. Siempre vuelve al barrio. Por eso nunca dudamos que se casaría en Rosario. El y Antonella son de acá, son muy sencillos¿, le cuenta Carla Lysiac a SPORT, más conocida como una de ¿las Mellis¿, ex compañera de Messi de la escuela General Las Heras y vecina. La última vez que lo vio cuenta que le pidió que le firmara su camiseta de Newell's y que él accedió sin problemas.

pateando Los vecinos y sus ex compañeros de colegio cuentan orgullosos que allí vivió el 10 del Barcelona. “Lo recuerdo siempre pateando la pelota.

Teníamos la costumbre de pasar a buscarnos unos a otros y cruzar todos juntos el descampado del Regimiento Patricios¿, cuenta Carla. 

Los amigos del crack lo esperan siempre en vacaciones y para las navidades. Uno de esos habituales es Diego Vallejos, ex compañero también de la escuela, e intimo amigo del crack.¿ A mí no me parece nada raro que se venga a casar acá porque él fue siempre igual, es una persona común y corriente que quiere estar cerca de su familia y de sus amigos”, dice quien compartió con La Pulga muchas horas de escuela, cumpleaños, y partidos de fútbol. 

¿Messi era una pulguita. Era muy chiquito, pero a él no le importaba. Los encaraba a todos, también a los más grandes. Y los pasaba como postes¿, cuenta Ramón Gallino, un vecino que fue compañero de Jorge Messi en Acindar, una empresa metalúrgica. 

colegio

En la escuela también lo recuerdan con cariño. Por eso una de las paredes tiene un mural que es el orgullo de los maestros y chicos que concurren a la institución. Tiempo después el futbolista donó pintura y artículos de informática a la institución cuya pared trasera presume de un mural con la figura del futbolista que pintó el artista brasileño Paulo Cosentino. ¿Lio de chiquito era muy tímido. Pero nos dio una gran sorpresa hace unos años volviendo a la escuela¿, cuenta Andrea Sosa una de sus maestras. Y recuerda: ¿El día que se apareció por sorpresa fue mágico. Muy emocionante para todos nosotros porque sabíamos que estaba triunfando en Barcelona. Y aceptó subirse al escenario para contarle a los chicos lo importante que era estudiar y esforzarse. Fue la última vez que lo vimos”, rememora Andrea.  

Sus amigos de la categoría 87'de Newell's le organizaron en diciembre pasado un asado de bienvenida y lograron reunir a aquel equipo mítico que gustaba y goleaba. El organizador fue uno d esos mejores amigos del Diez, Lucas Leguizamon. Y entre el asado, las anécdotas y las risas, la reunión se extendió hasta la madrugada.