"Es un entrenador meticuloso"

De la Peña: "Luis Enrique es un acierto total"

Iván De la Peña comparte la apuesta de la dirección deportiva del Barça. El aterrizaje de Lucho es la mejor de las alternativas para el futuro del banquillo culé

Tomàs Andreu

Pocos profesionales del mundo del fútbol pueden presumir de conocer en profundidad la vertiente personal y profesional de Luis Enrique. Uno de ellos es De la Peña. Poco amante de las entrevistas, Iván aceptó realizar una pequeña excepción con SPORT para desvelar a nuestros lectores algunos trazos de la personalidad del hombre que está destinado a liderar el futuro proyecto deportivo del Barça.

Para empezar, ¿qué le parece el fichaje de Luis Enrique como nuevo técnico del Barça?

No he hablado con él y el Barça aún no ha anunciado quién será el entrenador la próxima temporada, pero si es así, solo puedo decir que el fichaje de Luis Enrique es un acierto total.

Usted acostumbra a ser muy cauto y, sin embargo, su respuesta es tajante. ¿No tiene dudas?

Ninguna. Los resultados son los que hacen buenos o malos a los entrenadores pero, personalmente, veo a Luis Enrique como un entrenador ideal para el Barça. El mejor de los candidatos posibles en estos momentos.

Descríbanos algunas de las mejores virtudes de Luis Enrique en su faceta en los banquillos.

Es un entrenador extremadamente meticuloso en la planificación, trabajador como el que más en el día a día y con una enorme capacidad para controlar todas las parcelas que afectan a su equipo.

¿Qué piensa de aquellos que le califican como un obseso de la preparación física?

Es un entrenador que prepara hasta el más mínimo detalle todos los entrenamientos. No deja nada al azar y es conocido que dedica una atención especial al tema físico, pero también a otras cosas imprescindibles.

¿Por ejemplo?

Le encanta estudiar el desarrollo individual de todos los jugadores y ver cómo con el paso de las semanas cada vez aportan más al equipo. En sus equipos, todos los futbolistas progresan en su juego. 

Su apuesta es el retorno al modelo de éxito de los últimos años: exjugador y técnico de la casa que acaba al frente del primer equipo.

Conocer una casa como la del Barça te ayuda muchísimo en la labor. El Barça no es un club cualquiera y es necesario saber dónde estás y cuales son los retos que se exigen. Y Luis Enrique conoce el Barça como nadie.

Otro entrenador con un currículum reducido. ¿Puede acusar falta de experiencia?

Currículum reducido como entrenador pero brillante. Su paso por el Barça B fue espectacular y su trabajo en la Roma para mí aún se deja notar a día de hoy. Ver cómo estaba el equipo cuando llegó Luis a la Roma y ver cómo jugaba cuando él se fue marca un antes y un después. Y lo de esta temporada en el Celta está ahí, salta a la vista su gran campaña.

Volviendo a lo de conocer la casa, su amigo Luis Enrique tiene fama de ‘tipo duro’.

Eso solo es imagen. Es verdad que a veces, por su manera de hablar y expresarse, puede parecer seco o cortante, pero te puedo asegurar que es un gran tipo como persona y un profesional de los pies a la cabeza.

¿Y sabrá manejar un vestuario tan complicado como el del Barça?

Que nadie tenga una duda sobre ese tema. Luis Enrique ha sido futbolista del Barça, de élite, y las ha visto y vivido de todos los colores. Sabe cómo funciona todo y cuándo debe ejercer el papel de psicólogo para solucionar los posibles problemas que se presentan en todo colectivo.

Algunos recuerdan enfrentamientos con jugadores ‘estrella’...

Eso no quiere decir nada. Si ha tenido un problema es porque igual tenía un motivo para ello. Eso son cosas internas. Otra de las virtudes que acompañan a Luis Enrique y que todos los jugadores agradecen es que siempre va de cara. Te dice lo que piensa y eso a la larga es beneficioso para el colectivo. 

¿Detecta un cierto miedo en el ambiente?

No soy nadie para dar consejos, y menos a los aficionados. Sí me atrevo a pedir a la gente que aparque los miedos y que confíe en el trabajo del entrenador escogido. Al final, son los resultados los que acaban por decir si el trabajo de un técnico es bueno o es malo. Es la ley del fútbol.