Paco Alcácer desaprovechó otra oportunidad

El delantero del FC Barcelona Paco Alcácer no está teniendo el protagonismo que se esperaba en esta primera fase de la temporada. Luis Enrique Martínez, técnico blaugrana, volvió a darle una oportunidad en la final de la Supercopa de Catalunya frente al Espanyol, pero el jugador valenciano apenas dio señales de vida y volvió a confirmar que sigue peleado con el gol.

En los primeros 45 minutos Alcácer ni siquiera dispuso de una oportunidad para acabar con su mala racha y estrenar su cuenta goleadora como blaugrana. El delantero apenas conectó con los encargados de surtirle de balones (preferentemente Denis Suárez, Arda Turan y André Gomes) y su ansiedad le acabó costando una tarjeta amarilla, al tratar de zafarse del españolista Duarte con un manotazo. Se le volvió a ver demasiado ansioso en algunas oportunidades.

Alcácer pagó el hecho de que el juego de ataque del Barcelona no tuviese la fluidez habitual. Entró muy pocas veces en contacto con el balón y cuando eso sucedió siempre lo hizo en situaciones muy poco ventajosas para intentar buscar la portería defendida por Roberto. Su mejor opción en el primer tiempo llegó a los 5 minutos en un centro de André Gomes al que no pudo llegar por unos pocos centímetros delante de la portería.

En el segundo tiempo las cosas no cambiaron. Nunca bajó los brazos, pero la suerte siguió dándole la espalda. Su continua movilidad no se vio recompensada. Sus compañeros siguieron sin encontrarle y su mejor opción (minuto 61) llegó en un centro de Aleñá al corazón del área que Alcácer no pudo alcanzar por muy poco.