Neymar planifica su posible futuro en blaugrana

Neymar empieza a pensar ya en blaugrana. Sin grandes alardes, ni guiños, ni salidas de tono o declaraciones fuera de lugar que puedan encender los ánimos del Santos FC y de su afición, lo cierto es que el `mohicano¿ va preparando el camino de una posible salida del club que lo reveló y con el cual tanto se identifica. La `Joya¿ ya tiene decidido poner un punto y final a su etapa en Brasil. Su destino es el Camp Nou. No quiere un proceso traumático de ruptura sino que apuesta por una transición sin estridencias y polémicas innecesarias que puedan desgastar la actual directiva santista, con la que mantiene una magnífica relación, ni su propia imagen.

En todo lo que depende de él, Neymar va creando un escenario que facilite su salto a Barcelona. Prueba de ello es la `cláusula Barça¿ que está introduciendo en sus nuevos contratos de patrocinio. De esta manera, el futbolista se asegura mantener sus sponsors personales, en caso que deje de actuar en el fútbol brasileño. No se trata de un simple detalle en medio de páginas y más páginas con la letra pequeña, sino que es un aspecto estratégico, que implica unos 10 millones de euros anuales.

Que nadie se olvide Neymar, en su país, es un fenómeno de masas, un ídolo social transversal. Es el nuevo `menino prodigio¿ de la publicidad brasileña. A las puertas de cumplir los 20 años, su cartera de anunciantes es propia de un crack mundial. Las grandes compañías que operan en el pujante mercado brasileño se están dando literalmente de tortas para asociar su imagen a un futbolista que ha cautivado por entero a un país de 200 millones de potenciales consumidores.

El `mohicano¿ es el deportista más amado en su país y está en el Top-3 de las celebridades brasileñas con más pegada mediática, habiendo superado al `star system¿ de las telenovelas de la TV Globo, a cantantes con una carrera consolidada, o a futbolistas, como por ejemplo, Ronaldinho Gaucho, que juega en el Flamengo, el club más popular del país.

La `cláusula Barça¿ es beneficiosa para todas las partes: para empezar, el futbolista mantiene sus millonarios ingresos y, por otro lado, las marcas no tendrán que renegociar al alza los valores de un jugador que está ganando una dimensión global. Y en tercer lugar, para el propio Barcelona, que nunca comparte los derechos de imagen, es altamente positiva: manteniendo sus patrocinadores, el valor de su ficha no va a convertirse en un aspecto trascendental.

La publicidad ha sido el factor estratégico que ha hecho posible la permanencia de Neymar en el Santos. El verano de 2010, ante una oferta de 36 millones de euros, el `mohicano¿ firmó su primer contrato galáctico. Su club, aparte de mejorarle la ficha, le empezó a buscar patrocinadores, de los cuales se quedaba con el 30%.

Tras el acecho de Madrid y Barcelona, Neymar firmó en otoño su nuevo contrato, con el cual podrá dejar su club en 2014 con la carta de rescisión bajo el brazo. El porcentaje de los ingresos del Santos se redujo del 30 al 10%, lo que creó una cierta polémica en el entorno del club. El presidente Luis Álvaro de Oliveira aseguró que lo compensará con el aumento de taquilla, de los contratos de televisión y acciones de marketing. Desde que firmó la renovación, el futbolista ha asociado su imagen a tres grandes empresas: Banco Santander, la operadora de telefonía Claro y la gigante de bienes de consumo Unilever. En los tres contratos, aparece la `cláusula Barça¿.

Pero además, el Santos seguirá cobrando cuando Neymar esté en Barcelona. El brasileño quiere ser agradecido con el club que cambió su vida y la de su familia. Por este motivo, el futbolista, cuando negocie su baja muy posiblemente este verano, ofrecerá al Santos la posibilidad de seguir cobrando el 10% de sus actuales contratos de publicidad. Esta fórmula sería una muestra de buena voluntad del futbolista con la actual directiva santista, y, de paso, abarataría el precio de su traspaso.