EL PERSONAJE

Munir, el nuevo 'killer' del Barça

El pasado de la joven estrella naciente del Barça se remonta al fútbol de la calle en un pequeño parque del Escorial en Madrid

Munir fue el máximo goleador de la pretemporada del Barça

Munir fue el máximo goleador de la pretemporada del Barça / sport

David Boti

Es posiblemente una de las sensaciones más agradables de la pretemporada del Barça. Munir El Haddadi (Madrid, 1995) quema etapas como profesional del fútbol a un ritmo endiablado. Tras convertirse en el <strong>máximo goleador de la pretemporada con el primer equipo</strong>, el extremo de orígen marroquí llama fuerte a la puerta de Luis Enrique para presentar sus credenciales. Atesora en sus botas un fútbol de quilates y está llamado a ser una de las grandes revelaciones del continente en un futuro no demasiado lejano.

De ascendencia marroquí por parte de padre y española por parte de madre, su pasado se remonta al fútbol de la calle, junto a sus amigos del barrio, en un parque del Escorial, localidad donde nació un septiembre de 1995. Su padre, dada su latente calidad a su corta edad y el interés del joven azulgrana por dedicarse al mundo del fútbol, decidió llevarlo a un club que no estuviese lejos de casa y se decantó por el Galapagar. El director deportivo de la modesta entidad, José María Escudero, recuerda que en su primer año como infantil anotó más de 90 goles.

Tras aquella etapa, pasó al Santana dejando boquiabiertos a los mandatarios de la modesta entidad madrileña y muy por encima del nivel habitual para su edad, atrajo las miradas de ojeadores de medio mundo, entre ellos, el Atlético de Madrid, que lo convenció para acabar fichando por la entidad rojiblanca en el año 2010. Pasó las pruebas con solvencia y, esa misma temporada, lo cedieron al cadete A del Rayo Majadahonda, donde fue capaz de anotar 32 goles en 29 partidos. Y justo en aquel paso, se cruzó el Barça en la vida de Munir.

GARCÍA PIMIENTA, SU DESCUBRIDOR

José Luis Colomo, uno de los ojeadores que el conjunto culé tiene por la zona de Madrid, mandó informes al club destacando su calidad y Albert Puig, por aquel entonces coordinador del fútbol base, informó a García Pimienta, que acudió a seguir un partido en la capital en abril de 2011 tras haber leído los sobre un joven y eléctrico extremo, que pretendía media Europa y que los expertos definían ya como una de las nuevas perlas del fútbol mundial. La casualidad hizo que justo el día que el Barça comenzó a seguirlo en un Brunete-Majadahonda, Munir consiguió lo que en el mundillo del fútbol llaman el ‘hat trick perfecto’. El azulgrana anotó un gol con la pierna derecha, otro con la izquierda y uno de cabeza a la salida de un saque de esquina. 

Solamente aquella actuación en un soleado domingo en la capital española certificó el amor a primera vista entre el Barça y el joven futbolista. Ese mismo verano, tras los excelentes informes recibidos, el club movió ficha y, ante los incontables halagos recibidos, Munir se decantó, finalmente, por poner rumbo a Barcelona. Precisamente, García Pimienta sería su primer entrenador en el juvenil B azulgrana, donde acabó la campaña como máximo goleador, dando dos títulos al club: la Liga y la Copa de Catalunya. Ser la figura central del equipo durante dos temporadas le sirvió para encajar a la perfección en el juvenil A de Jordi Vinyals la pasada temporada, plataforma inmejorable para dar el salto definitivo al mundo profesional. Con su exquisita calidad, Munir se convirtió en uno de los protagonistas en la consecución de la Youth Champions League y el título en la División de Honor. Las especulaciones sobre su posible salida del club se acabaron desvaneciendo y, además, redondeó su temporada debutando con el Barça B de Eusebio Sacristán y brillando a un gran nivel.

Y el resto de la historia ya la conocemos. Munir es un verdadero diamante que el Barça encontró en el momento justo y en el lugar adecuado y que tiene que cuidar con mucho mimo. Tras su excelsa pretemporada con el primer equipo pide su oportunidad y Luis Enrique no descarta incorporarlo en sus planes. A sus 18 años, este joven extremo que comenzó jugando al fútbol en la calle por diversión quiere convertirse en una referencia dentro de este deporte. Tiene contrato hasta 2017 y una cláusula de rescisión de 12 millones de euros, que ascendería hasta los 35 si, finalmente, consigue tener ficha con el primer equipo. Un movimiento nada sospechoso teniendo en cuenta que en Can Barça saben que tienen un verdadero ‘crack’ en ebullición.

LOS MEJORES GOLES DE MUNIR DESDE SU LLEGADA A BARCELONA