Mis dudas sobre el fichaje de Luis Suárez

No estoy tan loco como para poner en duda las cualidades futbolísticas de Luis Suárez. Es más, ya en sus tiempos en el Ajax era de los que no entendía por qué el FC Barcelona no se lanzaba a por su fichaje, ya que le consideraba un jugador desequilibrante y que podía aportar mucho al equipo. El uruguayo triunfó en el conjunto holandés y tanto en el Liverpool como en Uruguay ha ido creciendo de manera notable.

Visto así, no hay ninguna duda de que su fichaje debe ser un acierto del Barça. Estamos, sin duda, ante uno de los mejores delanteros del mundo y, como tal, debe interesar al Barcelona. Pero a mi, francamente, su fichaje me presenta una serie de dudas. Y que quede claro que lo que se ha pagado por él, sea la cifra que sea, es lo que menos me preocupa. Siempre he defendido que un jugador se sabe si ha salido barato o caro cuando acaba su presencia en el equipo. Hay jugadores que han costado muy poco dinero y han resultado muy caros. Y otros por los que se ha pagado mucho, pero han resultado baratos.

Mis dudas sobre el fichaje de Luis Suárez son básicamente tres. La primera es su carácter. Denuncia por declaraciones racistas y tres mordiscos a jugadores rivales, revelan que es un jugador al que debe ser fácil provocar. Ese es su gran punto débil. Y eso lo saben ya todos sus rivales, todos los jugadores a los que se encontrará en los campos de fútbol de la Liga BBVA. En una entrevista esta misma semana en SPORT, Hristo Stoichkov ya le avisaba: "Te van a hacer la vida difícil", le decía. Y habla con propiedad, porque sabe lo que le pasó a él. Esta pasada temporada hemos visto la paciencia que ha tenido Neymar ante la gran cantidad de faltas que le hacían. Y sabemos que en un campo de fútbol las provocaciones son constantes. Dicen los psicólogos que si Luis Suárez ha reaccionado tres veces con un mordisco a un contrario, lo más probable es que lo vuelva a hacer. Y eso le provocaría unos cuantos partidos de sanción.

La segunda duda es más deportiva. Se ha hablado mucho de que era difícil la convivencia de dos super cracks en el mismo equipo. Eso de dos gallos en el mismo gallinero, ya saben. Y ahora serán tres los gallos que deberán compartir vestuario, egos, piropos y mimos. ¿Habrá para todos?

Tercera y última duda. Con tres delanteros como Neymar, Messi y Luis Suárez, que tienen aún muchos años por delante, ¿qué delantero querrá fichar por el Barça sabiendo que sus opciones de jugar serán mínimas? ¿Y cuál será el papel de Pedro, si se queda, o de un Gerard Deulofeu con un futuro increíble por delante pero que ahora tendrá a tres de los mejores delanteros del mundo en su equipo?

Todas esas dudas, y en especial el impacto que puede tener en la iamgen del club un posible acto grave del delantero uruguayo, son los que me hacen pensar, a día de hoy, que el Barça no debería haber fichado a Luis Suárez. Sé que futbolísticamente tiene muchas armas para que dentro de unos meses tenga que reconocer que me he equivocado. Y ojalá así sea y cuando acabe la temporada me tenga que comer este artículo con patatas. Prometo que no me importaría nada. Al contrario. Pero, hoy por hoy, tengo demasiadas dudas.