Las suplencias del argentino

Messi y el número 29

El crack argentino consiguió en el partido ante el Benfica una nueva marca relacionada con esta cifra

Jordi P. Camí

Leo Messi empezó el partido de Champions contra el Benfica en el banquillo. Una imagen que se ha repetido 29 veces en competición oficial desde que el tándem Pep Guardiola-Tito Vilanova cogió las riendas del equipo allá en la temporada 2008-09.

Fue precisamente el primer curso de Guardiola cuando el delantero argentino se sentó en más ocasiones en la banqueta con un total de 10, casualidades de la vida el dorsal que luce en su camiseta.

Fue el año en que el técnico de Santpedor volvió a instaurar las famosas rotaciones y Messi aún no era el mejor jugador del mundo, lo acabó siendo después de la exhibición en Madrid y el gol en la final de la Champions League.

Además ese verano del 2008 no pudo completar la pretemporada con el grupo al marcharse a Pequín para disputar los Juegos Olímpicos. Las dos siguientes temporadas Messi estuvo con los suplentes en siete encuentros.

Y la media ha ido bajando debido a la ascendencia del internacional argentino que siempre quiere jugar. Da igual el tipo de partido. Amistoso o encuentro oficial. Él quiere estar en la cancha siempre. Y más si está en juego el récord de Müller como contra el Benfica.

En el presente curso lleva dos partidos empezando desde el banquillo contando el encuentro de Champions ante los portugueses del pasado miércoles. Eso sí, la competición con más porcentaje de suplencias es la Copa del Rey. Son nueve en estas cinco temporadas.

En Liga son más, pero claro en muchos más encuentros, hablamos de 13 partidos de suplente en 150 enfrentamientos. Por tanto queda claro que Messi es intocable menos en las primeras eliminatorias de Copa o partidos oficiales sin nada en juego. Es el precio por ser el mejor jugador del mundo y querer jugar siempre. Un precio que él paga muy a gusto.