Un '10' en resistencia

Dídac Peyret

Valverde ha cambiado algunos hábitos de la etapa de Luis Enrique, pero no ha modificado una regla, aparentemente, inquebrantable. Messi no descansa.

El 10 lo juega todo, porque de otra forma no se sentiría cómodo. "Sabéis que siempre quiere jugar y donde mejor se encuentra, su hábitat natural, es competir". Lo explico Tito Vilanova con estas palabras en 2012. Y los años no han cambiado al argentino.

Lo sabe Valverde que se aplica en crear el mejor contexto para Messi. Primero acercándole más al área, en esa zona donde es demoledor, y también evitando suplencias o sustituciones que puedan torcer el gesto de La Pulga.  "¿Descanso? No ha llegado ese momento y no tengo mucho qué pensar. Un jugador que marca cuatro goles en un partido no lo suelo cambiar, no me ha pasado nunca”, recordó el pasado mes de septiembre.

El técnico lo tiene claro, de momento, no valora la posibilidad de que entre en la dinámica de rotaciones, a la espera de ver qué ocurre en la Copa. "Ha hecho una pretemporada normal. Con Mundiales, etcétera, es más difícil. Pienso que está fuerte, en este inicio de temporada pensamos que era importante que nos ayudara, luego ya valoraremos. Está bien y considero oportuno que juegue".

En total, La Pulga (12 con el Barça y cuatro con la albiceleste) y en Argentina temen por el desgaste dfle futbolista con vistas al Mundial. 

En octubre ya ha recorrido más de 19.000 kilómetros -como reflejan los datos del periodista Matías Ruffet de Crónica TV- y ahora solo con el Barça le esperan 6 partidos en 18 días, con otro encuentro de la selección ante Rusia previsto para el 11 de noviembre. 

Messi, que suma 17 goles en 16 partidos, nunca ha sido remplazado en este arranque de temporada, una tendencia que parece que se mantendrá en los próximos encuentros. Messi nunca descansa.