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Messi y Mascherano, diez años persiguiendo un sueño

Desde junio de 2006, cuando compartieron el Mundial de Alemania, intentan lograr un título con la selección: la final de la Copa América Centenario es su gran oportunidad 

Messi y Mascherano, durante un partido con la selección argentina

Messi y Mascherano, durante un partido con la selección argentina / sport

Sport.es

Leo Messi y Javier Mascherano, los dos jugadores del Barça que aspiran a convertirse en campeones de la Copa América con Argentina, cumplen este mes de junio diez años desde su primer gran torneo internacional, el Mundial de 2006 en Alemania: desde entonces, han pasado diez años en los que ambos han ido de la mano en la selección y desde 2010, también en el Barça. 

En el Mundial de 2006, el papel de ambos en el combinado argentino era secundario: Messi ni siquiera llegó a jugar en el partido decisivo, en una polémica decisión del seleccionador, José Pekerman. Pero desde entonces, el 'crack' del Barça ha sido indiscutible también en Argentina, en un ascenso paralelo al de Mascherano, que llegó a ser capitán de la albiceleste antes de darle el testigo del brazalete a Messi.

En aquel Mundial de Alemania, Messi y Mascherano empezaron a fraguar su amistad y a perseguir un sueño: lograr un título con la selección. Estuvieron a punto de lograrlo un año después, en 2007, en la Copa América que se disputó en Venezuela. Argentina alcanzó la final, con Mascherano y Messi como titulares, pero perdió 3-0 ante la Brasil de Dani Alves, el encargado de anotar el último gol del partido.

Los Juegos Olímpicos de Pekín, en el verano de 2008, sirvieron de bálsamo: Argentina ganó la medalla de oro tras derrotar en la final a Nigeria y Messi y Mascherano se convirtieron en campeones olímpicos. En el caso del defensa, por segunda vez, ya que también había sido oro en Atenas 2004.

Pero la experiencia olímpica fue solo un paréntesis en su sueño de ganar un título con la selección absoluta. Con la llegada de Maradona al banquillo de la albiceleste, Leo se convirtió en el '10' de Argentina y Mascherano, en el capitán. Todas las esperanzas estaban depositadas en el Mundial de Sudáfrica, pero Alemania rompió el sueño de la manera más cruel, con un 4-0 en los cuartos de final.

Ese año, sin embargo, marcaría un antes y un después en la relación entre Leo y Javier, con el traspaso de Mascherano del Liverpool al Barça. En su primera temporada en el equipo blaugrana, la 2010-11, Mascherano logró la Liga y la Champions. 

fracaso en casa

Pero Argentina volvió a fracasar en otro gran torneo internacional: la Copa América de 2011 parecía el escenario ideal porque se disputó en Argentina, pero la albiceleste cayó en los cuartos de final ante Uruguay, en la tanda de penaltis. El fracaso liquidó la etapa de Batista como seleccionador. Le sucedió Sabella, cuya primera decisión fue significativa: Messi sería el capitán de Argentina con la mirada puesta ya en el Mundial de 2014.

Argentina, ya con Leo como capitán, rozó la gloria en Brasil, pero acabó perdiendo la final del Mundial con un gol de Götze en la prórroga. Otro final cruel para Messi y Mascherano.

El destino aún les tendría reservado otro sinsabor, la Copa América del año pasado, disputada en Chile. Argentina también alcanzó la final, pero la perdió en los penaltis ante el equipo anfitrión.

Nuevamente en la final de un gran torneo, Messi y Mascherano tienen este domingo la oportunidad de alcanzar el sueño que llevan diez años persiguiendo: la posibilidad de lograr un título con la absoluta está a solo 90 minutos de distancia.