Ajax, 0 - Barça, 2

Messi guía al Barça hacia octavos de la Champions

El FC Barcelona se clasificó matemáticamente para los octavos de final de la Champions tras vencer por 0-2 al Ajax gracias a dos goles de Leo Messi

Messi, celebrando su gol con Pedro

Messi, celebrando su gol con Pedro / sport

Ricard López

El Barça mostró dos caras opuestas en un duelo que, pese al resultado final, fue más complicado y agónico de lo que parece. Los azulgranas jugaron con fuego y flirtearon con el desastre en una primera parte que debería invitar a una reflexión profunda. El 0-1 de Messi, superada la media hora, evitó el naufragio de un equipo que, durante un cuarto de hora (del minuto 15 al 30), perdió el rumbo y fue totalmente a la deriva. A base de coraje, y con más corazón y empuje que ideas, los de Luis Enrique sobrevivieron ante un rival que, hasta ese gol, llegó a tenerlos contra las cuerdas.

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Ajax - Barça

0
2
Alineaciones
Ajax
Cillessen; Rhijn, Velmant, Moisander, Boilsen, Klsassen, Serero (Denswil, min.80), Andersen (Riedewal, min.72), El Ghazi, Sigthórsson (Milik, min.62) y Schöne.
Barça
Ter Stegen; Alves (Addriano, min.83), Bartra, Mascherano, Jordi Alba, Sergio Busquets, Xavi, Rakitic (Rafinha, min.80), Messi, Luis Suárez y Neymar (Pedro, min.75).

El Barça se levantó, pero estuvo cerca de estrellarse en el suelo. El Ajax empezó adueñándose del centro del campo, y soltó su primer golpe con un remate de Andersen desde la frontal que salió rozando el poste (17'), después de dos fallos defensivos seguidos: primero de Alba -dejando escapar a su par por la banda-, y luego de Alves, con su mal rechace en el área.

La defensa azulgrana, esta vez con Bartra ocupando el puesto de Piqué -que se quedó, de nuevo, misteriosamente en el banquillo-, empezaba a flaquear, y en el resto de líneas las cosas no iban mejor. El Ajax, bien posicionado, no dejaba espacios, y el Barça, lento y previsible, carecía de profundidad. Ni rastro de la chispa, toque y pegada de antaño. Luis Suárez, escorado a la derecha y casi desaparecido en este periodo, y Messi, ambos bien marcados, apenas recibían balones. Tan sólo Neymar, de vez en cuando, desbordaba con sus arrancadas desde la izquierda.

El Barça sufrió, y de qué forma, del minuto 15 al 30. El Ajax le acorraló en su campo. Su presión era asfixiante. Y los de Luis Enrique se vieron incapaces de dar prácticamente tres pases seguidos durante toda esta fase. El caos azulgrana era total. La defensa, un coladero. Las pérdidas de balón, continuas. Y las triangulaciones y ataques locales, un auténtico baile. Ter Stegen, en el 26', evitó el 1-0 despejando un chut letal de Klaasen. Y suerte que el árbitro, Pedro Proença, no vio unas claras manos de Alba en el área después.

El desbarajuste era de aúpa, y el primer remate del Barça no llegó... hasta la media hora. Cillesen salvó a su equipo rechazando un trallazo de Alba en una internada por la izquierda. Pero ya no pudo hacer nada después. El 0-1 nació de una jugada confusa, en la que el Barça, con El Ghazi caído en las inmediaciones de Ter Stegen -al parecer, por un golpe-, inició un contragolpe. Tampoco el Ajax había lanzado antes el balón fuera. El caso es que Neymar se plantó al borde del otro área en una galopada, y Veltman le derribó, con la consiguiente falta y amonestación. Messi ejecutó el lanzamiento, y Cillesen lo despejó. Alves recuperó el esférico cerca del vértice del área, y lo colgó... para Bartra. El canterano lo bajó, y su pase forzado llegó a Messi que, de cabeza, no perdonó (0-1, 36'). Una acción a trompicones y poco estética, pero fructífera al fin y al cabo.

El gol tuvo un efecto balsámico. El Barça recuperó, como por arte de magia, el control y la confianza. Sobre todo tras el descanso, en la que su dominio fue claro. Los de Luis Enrique dejaron atrás la agonía. Su juego volvió a ser fluido, aunque bastante inofensivo. Y el Ajax reculó. A la hora de partido, Luis Suárez pudo haber sentenciado en un uno contra uno, completamente solo, ante el meta Cillesen, pero el meta holandés le adivinó la intención. El uruguayo se quedó sin marcar ante su ex equipo.

Los de Frank De Boer pudieron haber empatado en el 67', cuando Milik cabeceó al poste un centro de Serero. Pero la suerte les dio la espalda. No así al Barça, que se creció aún más por la expulsión de Veltman en el 70'. Su segunda amarilla, por frenar una contra de Messi, fue merecida.

Luis Enrique sorprendió luego sustituyendo a Neymar, uno de los mejores azulgranas en el Amsterdam Arena, por Pedro (74'). Y le salió bien porque, al cabo de un minuto, una combinación del canario con Messi acabó en el 2-0. Rakitic recuperó el esférico en la media, Messi hizo la pared con Pedro desde la frontal... y el argentino, ya en el área pequeña, culminó la acción enviando el balón a la red (75').

Fue la sentencia para el Ajax, al que a partir de ese momento no le quedó más que asumir la derrota... y la eliminación. Todo lo contrario de un Barça que logró matemáticamente el billete hacia octavos.