Mathieu, día D

Carles Puyol anunció oficialmente que dejaría el Barça el pasado 4 de marzo. Comenzó entonces, al menos sobre el papel, la carrera de la secretaría técnica encabezada por Andoni Zubizarreta para incorporar a un central de garantías a la plantilla blaugrana. Y todo ese trabajo puede empezar a dar sus frutos hoy mismo, el día clave para que el Barça avance de manera casi definitiva en el fichaje de su gran objetivo para reforzar la defensa, el francés del Valencia Jérémy Mathieu. 

Zubizarreta tiene previsto volver a verse este miércoles con su homólogo valencianista, Francisco Joaquín Rufete, para intentar avanzar en las conversaciones que deberían desembocar en el fichaje del polivalente jugador francés. Mathieu tiene contrato en vigor hasta 2017 (lo renovó hace exactamente un año) y una cláusula de 20 millones de euros que, por el momento, es el gran obstáculo con el que se está encontrando Zubizarreta.

El Valencia quiere hacerse fuerte: desde el primer contacto con el Barça, el club de Mestalla se ha remitido a la cláusula de rescisión del futbolista, negándose a negociar cualquier rebaja. Pero se trata de una postura inicial, que irá cambiando a lo largo de los próximos días, en cuanto el Barça presente una oferta en firme por el jugador, una propuesta que podría llegar hoy mismo, en la reunión prevista entre Zubizarreta y Rufete.

Será el cuarto episodio de una película que empezó hace varios días, con una llamada de Josep Maria Bartomeu, presidente del Barça, a Amadeo Salvo, su homólogo en el Valencia. Fue una primera declaración de intenciones por parte del Barça. Días después, Zubizarreta y Rufete se citaron a medio camino entre Barcelona y Valencia, concretamente en Peñíscola. Y el pasado lunes, el propio Mathieu dio un paso adelante: acompañado de su agente, Alex Bonnot, se reunió con Rufete en un hotel de Valencia para pedirle que escuche al Barça y que flexibilice su postura. Mathieu pidió a Rufete que sepa valorar su situación: a sus 30 años, no puede dejar escapar el tren del Barça, tanto en lo deportivo como en lo económico.

Además, el jugador trasladó a Rufete las dudas que tiene sobre el futuro deportivo del Valencia: el club vive en plena transición institucional (el empresario singapurense Peter Lim ha tomado el control del club y de su mano, desembarcará uno de sus grandes consejeros, el representante portugués Jorge Mendes) y Mathieu no ve claro que la plantilla ‘che’ mejore el nivel de pasadas temporadas.

Más allá de Mathieu, el Barça no descuida otros casos paralelos. El más significativo es el del joven brasileño del Paris Saint Germain  Marquinhos, un caso que el Barça ha decidido aparcar de manera temporal, a la espera de los próximos movimientos del club francés en el mercado. Si el PSG, en manos del jeque catarí Nasser Al-Khelaifi, se decide a seguir reforzando su defensa, el Barça podría volver a intentar la incorporación de Marquinhos. 

Pero no será una operación inminente: el Barça se ha concedido un margen de dos o tres semanas antes de realizar algún movimiento con el PSG o con el entorno del futbolista, cuyo contrato con el equipo francés vence en junio de 2018.

El mercado sigue vivo

Entretanto, la demora del Barça a la hora de apuntalar su defensa ha provocado que algunas de las posibilidades que ofrecía el mercado se hayan ido evaporando porque la mayoría de clubs han adelantado su planificación, en buena medida para que el Mundial no les coja con el paso cambiado. Es el caso de David Luiz, que ha dejado el Chelsea para incorporarse al París Saint-Germain, donde compartirá el eje de la defensa con su compañero en la selección brasileña Thiago Silva. Tampoco el francés Aymeric Laporte parece ya una posibilidad real, porque su cláusula acaba de pasar de 36 a 42 millones de euros, mientras que Matt Hummels, una de las opciones que más sonó hace meses, continuará en el Dortmund. 

A cambio, el desplegable de Zubizarreta aún tiene piezas en el mercado, y algunas de ellas, con excelente cartel, como Miranda, el brasileño del Atlético, o Mehid Benatia, de la Roma, que cumplirían el perfil que busca el Barça. Mangala (Oporto), sigue en el mercado. Los últimos en incorporarse a la lista de futuribles son el sevillista Federico Fazio (el Sevilla quiere renovar su contrato) y Bruno Martins Indi, versátil y contundente defensa de la selección holandesa que disputa el Mundial.