La mala suerte se cebó con Puyol

Un día que empezaba muy bien para Puyol terminó en un nuevo golpe moral para el de la Pobla de Segur. Después de volver casi milagrosamente al equipo y recuperarse en solo dos semanas de un estiramiento del ligamento cruzado de la rodilla izquierda -que tenía un tiempo estimado de baja de cuatro semanas-, el central azulgrana se lesionó en el minuto 75 de partido tras una mala caída al ir a rematar un córner.

Puyol apoyó todo el peso de su cuerpo sobre su codo izquierdo y éste cedió, lo que dejó una imagen dura sobre el césped de Da Luz. El capitán tuvo que ser retirado en camilla entre gestos de dolor y rápidamente fue evacuado a un hospital de la capital portuguesa, donde fue sometido a diversas pruebas. El público presente en el estadio lisboeta ovacionó al azulgrana al dejar el campo.

Los primeros informes médicos confirmaron que Puyol sufre una luxación de codo que, según la gravedad de las lesiones asociadas a la propia lesión -podría haber ligamentos dañados-, podrían obligarle a pasar por el quirófano, lo que le apartaría de los terrenos de juego como mínimo dos meses. Si finalmente no tuviera que ser intervenido, el tiempo de baja se reduciría hasta las 4-6 semanas.

Los médicos redujeron la luxación mediante anestesia e inmovilizaron el brazo del jugador, de manera que Puyol pudo viajar con el resto del equipo y pasará la noche en el Hospital de Barcelona, donde será sometido a más pruebas para establecer el alcance de la lesión.