Los tres centrales 'finalistas'

Si fuese un concurso de televisión, solo quedarían tres aspirantes con posibilidades de ganar: el proceso de selección que el Barça ha puesto en marcha para incorporar a un central de garantías avanza poco a poco, y el foco del objetivo se va reduciendo, al punto de que en la lista deginitiva solo aparecen tres nombres, dos brasileños y un francés: por orden de prioridad deportiva, Thiago Silva (París Saint-Germain), David Luiz (Chelsea) y Jérémy Mathieu (Valencia).

La gran prioridad de Tito Vilanova es el capitán de la selección brasileña y del París Saint-Germain. Thiago Silva, de 28 años, responde punto por punto al perfil que busca el cuerpo técnico: es un central con experiencia internacional, curtido en una Liga tan exigente como la italiana (jugó tres años en el Milan), potente en el juego aéreo, rápido y muy hábil en el corte. El cuerpo técnico del Barça admira, sobre todo, su enorme jerarquía en el campo. Si se confirmase su fichaje, el brasileño sería titular indiscutible desde el primer día. El resto de nombres que maneja el club no tendrían la titularidad tan garantizada.

En su contra, en cambio, juega el factor económico. El PSG se resistirá a traspasarlo (entre otras razones, por temor a que el emergente Mónaco le arrebate la supremacía del fútbol francés al club de la capital) y además, la ficha que percibe el brasileño es, a día de hoy, inasumible para el Barça. Thiago Silva recibe unos ocho millones de euros al año. Solo si renunciase a una parte de sus emolumentos podrían reactivarse las negociaciones.

Otro brasileño, también internacional, aparece como 'plan B'. David Luiz, del Chelsea, tres años más joven que Thiago Silva, está pendiente de los primeros informes deportivos de José Mourinho para tomar una decisión sobre su futuro. El portugués, pendiente de tomar posesión como técnico del Chelsea, no parece muy convencido del estilo de David Luiz, lo cual podría acelerar su salida. El Barça cree que podría ficharlo por 25 millones de euros, aproximadamente.

Es un central muy habilidoso con el balón (es habitual verle tirar faltas desde la frontal), rápido en espacios abiertos y muy proclive a emplear el 'tackle', el barrido a ras de suelo para arrebatar el balón de un rival. También va bien por arriba, un aspecto del juego que el Barça necesita reforzar con urgencia.

El tercero en discordia es el más sorprendente. Se trata de Jérémy Mathieu, defensa francés del Valencia, el más veterano de la terna final (29 años). Llegado al Valencia en 2009, se desempeñó como lateral zurdo hasta que Ernesto Valverde le resituó, esta misma temporada, como central.

Buen conocedor de la Liga española, Mathieu está dando largas al Valencia a la hora de renovar su contrato, que vence en 2014, y podría salir del Valencia por ocho millones de euros.