Los planes de Luis Enrique en el Barça

El entrenador asturiano va perfilando el modelo de equipo que desea para su regreso al Barcelona, ahora como responsable del primer equipo

Francesc de Haro

Todo apunta a que Luis Enrique se sentará en el banquillo del Camp Nou la próxima temporada. El asturiano va perfilando el modelo de equipo que quiere para devolver al FC Barcelona a los éxitos logrados en años anteriores.

En todas las conversaciones que ha mantenido con el director deportivo del club, Andoni Zubizarreta y sus ayudantes, Luis Enrique le ha explicado como ve todo el tema y lo que necesita para devolver la mejor versión al equipo.

En este aspecto, la filosofía de Luis Enrique pasa en primer lugar por trabajar con un staff corto y con gente con la que haya colaborado en los últimos años. El actual staff del primer equipo está sobredimensionado de personal ya que han coincidido personas que trabajaron con Josep Guardiola, los colaboradores que trajo Tito Vilanova y el equipo que pidió Gerardo Martino y que llegaron el pasado mes de julio. El técnico asturiano ha pedido que se rebaje el número de personas que lo forman ya que él, además, vendrá con las personas con los que ha trabajado en los últimos años en la Roma y en el Celta.

Por lo que se refiere a la plantilla, Luis Enrique también se diferencia con los anteriores entrenadores en que desea una plantilla larga, de 23 o 24 jugadores. Tanto Guardiola como Tito cuando confeccionaban las plantillas las hacían cortas ya que no superaban los 20 jugadores. Ambos recurrían al filial en caso de emergencia. Luis Enrique también estará pendiente de la cantera -conoce a la perfección los actuales jugadores del equipo de Eusebio- pero quiere tener una plantilla numerosa y de calidad que permita fomentar la competitividad y que nadie considere que tiene la titularidad asegurada.

Considera que desde esta forma el equipo saldría ganando. Su deseo es poder tener a dos jugadores de primer nivel en cada una de las once posiciones.

En esta planificación de la plantilla hay puntos en los que el técnico asturiano tiene muy claro como debe reforzarse. Uno de los puntos en los que ya se ha hablado es tener tres porteros de gran nivel. Fichado Ter Stegen -especulan en Alemania que hoy podría anunciar su fichaje por el Barcelona-, Luis Enrique desea otros dos porteros que pueden ser titulares, uno de los cuales podría ser Masip.

CINCO CENTRALES

También tiene claro que debe reforzarse la defensa y en especial en la posición de central. La idea del todavía entrenador del Celta es contar con 5 jugadores en esa demarcación. Tres de ellos están en la actual plantilla (Bartra, Mascherano y Piqué) por lo que la idea es fichar a dos jugadores en esa posición, uno de los cuáles podría ser más experimentado (tipo Miranda) y otro más joven (tipo Laporte).

Otra de las diferencias con respecto a los últimos años es la posibilidad de incorporar a un delantero centro nato. No se trata de un primera espada sino de un jugador que en un momento determinado pueda darle un nuevo rumbo al partido y que, además, acepte el papel de ‘segundón’ sin crear problemas. 

El Barcelona ya conoce estas peticiones de Luis Enrique, a las que se debe añadir otros fichajes (atención a Cuadrado con quien el Barcelona ya ha mantenido contactos) y recuperar a Rafinha a quien este año ha tenido en el Celta. El asturiano también explicó a la dirección deportiva de la entidad que es necesario dar de bajas a aquellos jugadores que han tenido un papel testimonial esta temporada.

ESTILO PROPIO 

Luis Enrique impregnará a la plantilla su carácter ganador. El asturiano siempre ha sido una persona ambiciosa, que quiere ganarlo todo y desea que este espíritu regrese al vestuario. Eso se ha visto esta temporada en el Celta ya que con su motivación el equipo ha salido del pozo y se encuentra en una posición cómoda en la zona tranquila de la clasificación. 

El futuro entrenador del Barcelona devolverá la cultura del esfuerzo al vestuario. Luis Enrique es una persona muy metódica que no deja ningún detalle a la improvisación y que pide la máxima implicación a todos sus jugadores. Tiene muy claro que quien no esté comprometido no puede formar parte de su proyecto.