El método Valverde y los hombres del Txingurri

Ernesto Valverde llegará al Barça acompañado por dos piezas básicas en su carrera en los banquillos; su segundo Jon Aspiazu y el preparador físico José Antonio Pozanco.

Dos figuras clave para entender el método Valverde. Una forma de entrenar basada en el diálogo, donde se busca más convencer que dar voces. "En el cuerpo técnico de Valverde no hay una figura que haga de poli malo. Pero sí que hay un contrapunto entre Valverde y Aspiazu", asegura el exjugador del Espanyol, Moisés Hurtado.

El centrocampista conoce bien la figura del Txingurri, también a los hombres que le acompañan en el banquillo. Cada uno tiene un rol y un perfil muy definido. Valverde es dialogante, pero mantiene las distancias. Aspiazu es más impulsivo, pero también el más bromista. "Es vasco, vasco", aseguran en su entorno. Y al igual que Ernesto va de cara con un lenguaje directo. No es de los que se anda por las ramas.

"En el cuerpo técnico de Valverde no hay un poli malo" (Moisés Hurtado)

El segundo de Valverde acostumbra a mirar la primera parte de los encuentros en el palco. Ahí puede analizar mejor el partido y darle otra perspectiva de lo que está ocurriendo en el campo.

Lo explicaba así, recientemente a este diario, Ángel Pereda, jefe de Deportes de <em>El Correo</em>: "Tiene una enorme capacidad para leer los partidos. Lo desmenuza como nadie y cuando hablas con él de algún partido, alucinas porque ve cosas que pasan desapercibidas a ojos del resto”.  

Pozanco y el recuerdo de Guardiola

Pozanco es un personaje clave para los equilibrios del vestuario. Cuando un jugador tiene un bajón o pasa por un mal momento, acostumbra a ser uno de los grandes apoyos del cuerpo técnico de Valverde. 

Por edad y por pasado futbolístico -también por talento- acostumbra a conectar con los jugadores. "Cuando los jugadores del Barça le vean tocar el balón, lo van a apreciar, porque tocará el balón mejor que el noventa por ciento de la plantilla", resalta Hurtado.

Guardiola recordaba así su experiencia con Pozanco en el libro Mi gente, mi fútbol . "Paco Seirul.lo es de otra pasta. Le guste o no le guste, cumple su trabajo. Es un profesional extraordinario al club para el que trabaja. Y con un valor añadido. Como enseña, como es un verdadero educador, deja huella y herencia para que se siga su camino. En nuestro caso, en el Barça, ya hay un preparador físico que ha tomado ese ejemplo. Es el 'Ros' Pozanco. [...] Tiene algo especial. Jugué con él en el Barça B y tenía una izquierda que era la octava maravilla. Prodigiosa. La ponía y me consta que aún la pone, donde quería y donde quiere. Cruyff estaba enamorado de él".  

Valverde es partidario de mensajes cortos y claros; no le gusta inflar de conceptos a los jugadores

Problemas en el corazón le obligaron a dejar el fútbol, pero ahora disfruta de otra forma; también cerca del césped.  Y como Seirul.lo, organiza entrenamientos con el balón como protagonista. Intensidad sí, pero con la pelota en la mayoría de ejercicios. El futbolista se lo tiene que pasar bien.

El mensaje y la pizarra

Valverde no es de los técnicos que llena a los jugadores de conceptos. Al contrario, es partidario de mensajes cortos y claros. Hurtado recuerda, así, el método del técnico.

"Dan poca información y deja cierta autogestión del grupo. Si ve que algo se tuerce por el camino, matiza cosas. A veces la táctica está sobrevalorada en la visión sobre los entrenadores. Valverde sabe poner a cada jugador en su sitio; ahí lo tiene muy claro y como gestor de grupo el ambiente es bueno".