La lesión de Dembélé frustró una salida muy avanzada

La hoja de ruta a seguir con Ousmane Dembélé está muy definida por el FC Barcelona. La idea principal era vender al delantero francés, pero la lesión que sufrió en la Eurocopa trastocó los planes azulgranas y ahora la estrategia es que renueve para que no sea agente libre a partir del 1 de enero de 2022.

El Barça había tomado la decisión en firme de poner a Dembélé en el mercado y, de hecho, había avanzado mucho en una operación a tres bandas en forma de trueque. Sin embargo, la lesión del galo en el partido contra Hungría dinamitó los planes barcelonistas.

Cuatro meses KO

El jugador sufrió una desincersión del tendón del bíceps en la rodilla derecha que necesitó tratamiento quirúrgico. Así, el 28 de junio, fue intervenido en Turku (Finlandia) por el doctor Lasse Lempainen bajo supervisión de los servicios médicos del FC Barcelona. La operación, tal y como informó la entidad azulgrana, fue un éxito y el tiempo de baja quedó establecido en cuatro meses aproximandamente.

Frustrada la operación, el Barça está ahora por la labor de conseguir que el jugador renueve su contrato -a la baja-, que expira el 30 de junio de 2022. El objetivo es que no se vaya libre después de que el desembolso por el jugador fue mayúsculo en 2017: 105 millones de euros fijos más un máximo del 40% de esta cantidad (42 millones) en variables.

Vista la inversión y el rendimiento del jugador, el Barça considera que no puede dejarlo escapar sin recuperar parte del capital que desembolsó. Caso de que Dembélé no se avenga a renovar, al Barça no le temblaría el pulso, cuando se recuperara, de dejarlo en la grada.