Leo Messi, títulos antes que dinero

La ambición deportiva de Leo Messi no cesa

La ambición deportiva de Leo Messi no cesa / Marc Casanovas

Toni Frieros

Toni Frieros

La renovación de Leo Messi, como es público y notorio, se ha convertido, casi, en ‘tema de Estado’. Y a tenor del ruido mediático que hemos tenido en los últimos días diríase que es lo que más le importa al barcelonismo. 

La continuidad del astro argentino en el Camp Nou, cuyo contrato vence el 30 de junio de 2018, cuando ya tendrá 31 años, mantiene en vilo no solamente a la afición culé, también a todo el mundo del fútbol.

¿Cómo está el tema Messi realmente? ¿Existe el riesgo de que no renueve? ¿Le molestaron las últimas declaraciones de Grau y de Gratacós? Lo primero que hay que decir es que el máximo sorprendido por todo lo que ha sucedido ha sido el propio jugador, por muy acostumbrado que esté a que todo lo que tenga que ver con su persona se magnifique y aparezca en el primer plano de la actualidad mediática.

Y en el mismo umbral de importancia hay que afirmar, como ya dijimos en nuestra portada del pasado 20 de diciembre, que Leo Messi quiere renovar y seguir en el Barça. Su deseo es continuar vestido de azulgrana más años, por eso está muy tranquilo ante los pasos que ambas partes tienen que dar en un futuro a corto plazo, tanto por la suya propia, concretamente su padre Jorge y sus asesores, como por la del FC Barcelona, donde Josep María Bartomeu llevará personalmente la negociación.

A día de hoy, la única realidad es que, como explicamos hoy en las primeras página de nuestro diario, todavía no se ha producido esa reunión entre las dos partes, que es lo mismo que decir que el FC Barcelona no ha presentado su primera oferta formal de renovación.  Bartomeu pretende llevar este asunto con la máxima discreción, por lo que es muy probable que no informe a nadie, quizá ni a su junta directiva, hasta que tenga el acuerdo cerrado a cal y canto. 

Es un tema muy recurrente, en las últimas semanas, decir y escribir que el dinero será el gran campo de batalla en esta negociación. Y se equivocan. Aun siendo verdad que Leo Messi deberá seguir siendo el jugador mejor pagado de la plantilla, porque por algo se trata del mejor futbolista del mundo, no es cuestión de ponerle a la altura de lo que hipotéticamente podrían pagarle en China o en la Premier, porque eso es imposible y Messi conoce perfectamente hasta donde puede llegar el FC Barcelona. Messi persigue ese objetivo. El dinero, para él, no es la máxima prioridad.

¿Qué es lo que antepone Leo? Muy sencillo, el proyecto deportivo, tal y como ya planteara la última vez que renovó, contrato y condiciones que llevó personalmente el entonces vicepresidente económico azulgrana Javier Faus.

Lo que más le preocupa al diez barcelonista es que el FC Barcelona continúe siendo competitivo, que siga aspirando a ganar todos los títulos y que se forme una plantilla que esté a la altura de esas expectativas

Este, y no otro, es el principal mensaje que quiere enviar Messi al FC Barcelona, cuyos responsables son conocedores de esa ‘obsesión’, si así puede decirse. Ojo, no se tratra de que Messi imponga entrenadores o jugadores, porque en esos temas él nunca se mete. Él solo quiere que el equipo continúe por la senda del éxito iniciada en aquel lejano 2006 con Rijkaard en el banquillo y continuado por Guardiola, Tito Vilanova y Luis Enrique, en lo que se ha convertido en toda una década prodigiosa.

De hecho, a excepción de los dos últimos años con Rijkaard y la temporada de Tata Martino, el de Rosario siempre ha podido levantar un trofeo. Es lo que más feliz hace a Leo, ganar títulos, estar en lo más alto. Está acostumbrado a luchar por todo y lo que peor lleva es perder. 

Una baza que tiene el club a su favor, y que no es baladí, es el gran esfuerzo económico que ha hecho para renovar a Neymar y a Luis Suárez, algo que hace muy feliz a Messi, tanto por la gran amistad y complicidad que tiene con ellos, como por la garantía de que el equipo seguirá siendo competitivo.  Y si lo ha hecho con Ney y Suárez, ¿cómo no lo va a hacer también por Messi? Todo a su tiempo.

En el club ya saben que, mientras no se firme el contrato de renovación y ampliación, deberán soportar el contínuo sainete de si firma o no firma, así como aguantar rumores y noticias artificiales sobre el interés de varios equipos, especialmente PSG y Manchester City.

Este proceso ya lo vivió el Barça con la renovación de Neymar, así que está perfectamente acostumbrado a vivir este tipo de situaciones.

Hay que tener en cuenta, además, una cosa que nunca se dice y que es una verdad como un templo: Messi es culé, el Barça es su club y Barcelona su ciudad. Un cordón umbilical tan sólido es muy difícil de romper. Aunque lo intenten.