Ivan Labanda: "Imitar a Luis Enrique es un regalo"

Ivan Labanda está disfrutando de una gran experiencia con el musical `Scaramouche¿

Ivan Labanda está disfrutando de una gran experiencia con el musical ‘Scaramouche’ / MARC CASANOVAS

Àngels Fàbregues

Àngels Fàbregues

Eres un actor que no para de trabajar. ¿Suerte?

La suerte se la tiene que buscar uno. Es la suma del talento, la inteligencia y seguramente otros factores que no están en nuestras manos. Me considero afortunado.

Deporte y política, vaya dos filones para hacer imitaciones.

Sí, son de interés popular.

¿Te implicas en la realidad del deporte y la política o simplemente sigues el guión?

Es imposible no estar implicado. Contamos con unos equipos brillantes de guionistas, realización, producción, arte… pero el ritmo del programa y la inmediatez exigen mucho al actor sobre todo para resolver problemas que nos encontramos ‘in situ’, situaciones... El Polònia y el Crackòvia son una buena ‘mili’ actoral.

El personaje que más te identifica es Luis Enrique.

Sin duda.

¿Cómo te llegó?

Yo hacía de Tata Martino y salió la noticia de que le sustituiría Luis Enrique. Creí que podría hacerlo bien. 

Y empezó con un musical.

Sí, querían estrenar el Luis Enrique con un musical por lo que yo era la carta más segura. Lo ‘petó’ mucho y me quedé yo el personaje. Imitarle es un regalo. Lástima que se vaya.

¿Cómo lo preparas?

Mirando muchas ruedas de prensa, muchos vídeos de YouTube de entrenamientos, partidos, entrevistas…

Perdona, entrevistas pocas...

Tienes razón.

Sigamos.

A partir de todo lo que visiono voy sacando los rasgos más destacables y llega un momento en el que el personaje vuela solo. Cuando esto pasa es algo maravilloso.

¿Que sea tan antipático con la prensa debe ser de gran ayuda?

No es que me ayude, pero reconozco que me encanta. A mí me gusta mucho cómo es Luis Enrique. Es un tío que no se anda con chiquitas. Si le hacen una pregunta que considera estúpida se pone de culo. Me parece muy bien. Es un tío muy honesto en este sentido.

¿Has tenido la oportunidad de conocerle?

No y me muero de ganas.

¿Por qué?

Porque seguro que es una persona interesante. No quiero conocerle por ser su imitador sino como persona. Intuyo que es alguien con quien me llevaría superbien.

¿Le gusta que le imiten?

No me ha llegado nada al respecto. Sé que antes era muy fan del Crackòvia, ahora ya no lo sé. Pero no creo que le importe demasiado.

Pasar de Tata Martino a Luis Enrique complicado… son la antítesis.

Sí, son muy diferentes. Tata era entrañable. Construiamos una especie de abuelo, así muy pasado de moda… darle vida desde la crítica y el cariño era una mezcla muy divertida. Aún me llegan comentarios de Sudamérica que nos reclaman que lo recuperemos. A él le hacía mucha gracia la imitación y su hija era superfan…

También has imitado a Cristiano Ronaldo.

No estaba cómodo imitándolo. El Cristiano Ronaldo de Bruno Oro era tan bueno que coger el relevo fue una putada. Lo intentas hacer lo mejor que puedes, pero la gente tiene integrado el otro. 

¿Y Mourinho?

También fue otro caso que me costó mucho.

¿Cuándo son personas tan extremas es más fácil imitarlas?

Son más fáciles, pero igualmente hay gente que te entra más y gente que te entra menos. Cuando tienes la libertad de inventarte un personaje nuevo te sientes mucho más libre, puedes ser más atrevido. 

¿Qué jugador del Barça te gustaría imitar?

Messi, no. Es un personaje bastante maldito en el Crackòvia porque es muy complicado de imitar. Tal vez me daría morbo imitar a Neymar. Está tan lejano de mí que sería un reto… Iniesta también.

¿En qué características te fijas? 

Imitar a un deportista siempre es más difícil que imitar a un político. El material es muy limitado. Son supersosos, son muy planos… Ves una rueda de prensa de Messi y no sabes qué coger. Sus características no son nada televisivas y al final te lo tienes que inventar. 

¿Cuando imitas a alguien le coges simpatía?

Es inevitable. Dicen que conocer es querer. Incluso pasa con Rajoy. La imitación lo humaniza y tener que ponerle cosas tuyas al personaje hace que lo acabes queriendo.

¿Eres culé ‘tribunero’?

No, aunque es cierto que el fútbol cada vez me gusta más. Desde que estoy en el Crackòvia le he cogido el tranquillo y me gusta porque tiene una parte ‘culebronera’ importante.

¿Y cómo vives el momento actual del Barça?

Luis Enrique es un tío muy inteligente que sabe muy bien lo que hace. Yo confío mucho en él. Veo que le adoras.

Es que me cae muy bien. Creo que es un tipo muy brillante y sabio. Guardiola  era más místico; Luis Enrique tiene otro tipo de inteligencia más efectiva y más terrenal, pero muy brillante. 

¿En qué género te sientes más cómodo?

Me gusta hacerlo todo porque todo te implica técnicas diferentes y son retos diferentes. A mí lo que me gusta son los retos. 

¿El musical ‘Scaramouche’ ha sido un reto más?

Sobre todo por la esgrima. No había hecho nunca esgrima y he tenido la oportunidad de trabajar con Jesús Esperanza, el mejor de España. Se trata de un musical ambientado en la etapa prerrevolucionaria francesa con un héroe que se mide a las clases sociales más altas para defender al pueblo y hacer que el malo, que soy yo, no se salga con la suya. Es un entretenimiento hecho con mucho amor hacia el teatro.