GALATASARAY, 75 - FC BARCELONA, 78

Huertas y Oleson sellan el billete a la Final Four

El Barça sufrió de lo lindo en el Abdi Ikpeci para conseguir un triunfo vital que vuelve a clasificar a los azulgranas para una nueva Final Four de la Euroleage

Sergio Vera

Picando piedra, sufriendo y trabajando hasta el último segundo pero el Barça estará en Milán. La Final Four volverá a contar con la presencia del FC Barcelona por quinta vez en los últimos seis años después de despachar al Galatasaray por 3-0 en la serie de cuartos.

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EUROLEAGUE

75
78
Alineaciones
GALATASARAY
Arroyo (21), Markoishvili (8), Hairston (5), Erceg (19), Aldemir (7) -cinco inicial-, Koksal (-), Bonsu (-), Macvan (11), Guler (-), Arslan (2), Dudley (2) y Domercant (-).
BARÇA
Huertas (16), Oleson (13), Papanikolaou (3), Lorbek (9), Tomic (6) -cinco inicial-, Pullen (7), Dorsey (1), Sada (6), Abrines (5), Lampe (4), Nachbar (8).

En su primer 'match ball' europeo, el Barça no perdonó gracias a la irrupción de Marcelinho Huertas y Brad Oleson justo cuando más lo necesitaba un equipo que jugó sin Navarro. Ni el brasileño ni el escolta aparecieron en la primera mitad. Se les esperaba pero no estuvieron. Sin embargo, sacaron la cabeza en el momento justo para dar el golpe de gracia a un Galatasaray entregado a una épica remontada.

El Barça comenzó sin ritmo, fallón y a merced de Zoran Erceg (19 puntos). El pivot serbio percutió a la defensa azulgrana con su juego abierto haciendo daño a los pivots azulgranas. Arroyo tomó el mando del encuentro superando a Huertas y la mayor intensidad del conjunto de Ataman puso en pie a las 12.000 almas que alentaban a los turcos en las gradas del Abdi Ikpeci.

PULLEN DESATASCA AL BARÇA

El 23-15 con el que se llegó al final del primer cuarto fue un serio aviso para un Xavi Pascual que apostó por Pullen para desatascar al equipo. El norteamericano cogió las riendas del equipo en el segundo cuarto anotando siete puntos en menos de diez minutos y dinamizando el ataque de un equipo que seguía sin encontrar a Tomic ni Oleson.

El Barça se acercaba sigilosamente en el marcador pero los tiros libres mantenían vivos a un Galatasaray que, pese al arreón azulgrana, se mantenía firme dominando al descanso por 40-35.

MARCELINHO AL RESCATE

No encontraba el camino el Barça para dar la vuelta al marcador pero endureció la defensa para dificultar los ataques turcos. A tres, a dos, a uno... y error. El toque psicológico de dar la vuelta al marcador no llegó hasta el minuto 30 (52-53) con una canasta de un Huertas que había visto en el banquillo gran parte del segundo y el tercer cuarto. El descanso pareció sentarle bien bien porque volvió a pisar la pista dispuesto a dinamitar el encuentro. El base del Barça no ha jugado su mejor serie pero quizás herido en su orgullo sacó lo mejor de sí mismo para liderar a sus compañeros en un momento clave.

Marcelinho se adueñó del balón y se batió en duelo con el boricua Carlos Arroyo que manejó al Galatasaray a su antojo. El Barça parecía despegar, Huertas encontraba a Oleson y el 57-62 (min.34) parecía ser el principio del fin de los turcos. Lejos de la realidad el Barça se empeñó en que el partido acabará decidiéndose a cara o cruz. Un triple de Arroyo y un contraataque de Markoishvili puso por delante al Galatasaray a falta de un minuto. El error de Huertas en el pase que propició el contraataque de Markoshivili acabó siendo un acicate para el brasileño que se echó el equipo a la espalda en la recta final.

Punto arriba, punto abajo. Con el Barça dos arriba en el marcador y 23 segundos por jugar, Dorsey voló como 'Superman' para taponar la penetración de Arroyo. Oleson acabó con el balón en las manos y pidió paso para decidir el encuentro. El de Alaska remató desde el tiro libre el último aliento de un Galatasaray que se resistía a morder el polvo con Arroyo desatado. Fue tarde para los turcos. El Barça amarró el encuentro con un 75-78 que sabe a gloria.

ESPERANDO RIVAL EN MILÁN

Real Madrid o Olympicaos serán el siguiente escollo. El 2-0 para los blancos antes de visitar El Pireo hacen que un nuevo clásico esté más cerca que un duelo contra los griegos, aún así solo queda esperar porque lo que sí está claro es que el Barça volverá a pelear por conquistar su tercera Euroleague en Milan.