FC BARCELONA

La gran transformación de Neymar

Neymar está trabajando intensamente en el gimnasio para seguir ganando masa muscular y convertirse así en un jugador mucho más fuerte físicamente. Su esfuerzo le está dando resultados

El antes y el después de Neymar

El antes y el después de Neymar / sport

Albert Masnou / Javier Miguel

Detrás de la sonrisa fácil, de sus frívolas apariciones en las redes sociales, de sus escapadas anuales a Brasil, se esconde un Neymar con dos ideas muy claras que marcan su camino como jugador. En primer lugar, la voluntad de crecer como futbolista para llegar a ser un día el mejor. Y en segundo término, su voluntad de ser feliz.

Neymar ya ha confirmado con creces esa segunda idea pues ha hecho oídos sordos a ofertas muy superiores, tanto ahora, antes de renovar, como en 2013, porque “el Barça es mi casa”. Sólo hay que echar un vistazo a su físico para darse cuenta de que Neymar es otro jugador al que llegó procedente del Santos.

PISCINERO

Antes era acusado de piscinero, consecuencia de su endeblez física, mientras que ahora se acerca más al físico de Leo Messi o el propio Luis Suárez. Ambos jugadores, de mayor edad también y por lo tanto más hechos físicamente, cuentan con una fortaleza fuera de lo común, consecuencia de un dilatado trabajo en el gimnasio. Neymar está en ello. El brasileño llegó con 64,5 kilógramos y ahora, según datos oficiales, ya estaría en los 68.

Neymar pesa más, producto de un intenso trabajo en los gimnasios que le han llevado a ganar un poco más de tres kilos de masa muscular. El objetivo es alcanzar los cinco kilos. Es un reto que se ha marcado el jugador con los dos preparadores físicos con los que trabaja, el brasileño Ricardo Rosa y el azulgrana Antonio Gómez.

El primero vive en Barcelona, en la misma casa que Neymar, con quien trabaja de forma diaria en el gimnasio que tiene el jugador. El segundo, fichado esta temporada, es con el que trabaja en la Ciutat Esportiva en rutinas de dos veces por semana. El objetivo, como decíamos, era llegar hasta los 5 kilos de masa muscular. Superar esa cifra sería peligroso porque entonces le mermaría la velocidad, algo que el club no quiere que pase porque sería restarle potencial y una de las grandes habilidades del jugador. Neymar tiene un plan muy definido y el reto es fortalecerse físicamente para sea un hueso más duro para los defensas rivales.

MÁS CONSISTENTE

Neymar está dando pasos para ser más trascendente, más importante, más consistente. La mejora física es considerada clave para los especialistas, pero hay otro argumento que no se le escapa a nadie: el mental. Cuando Neymar se siente señalado, el brasileño no se arruga. Lo ha demostrado con la selección de su país tanto en la Copa América como en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, y lo demuestra en el Barcelona cuando Messi no está en el terreno de juego.

Ocurrió la pasada temporada cuando el argentino se lesionó. Entonces Neymar ofreció la mejor versión de sí mismo, fue más resolutivo que nunca y lideró al Barça con una extraodinaria racha de once goles en los diez partidos en los que no estuvo Leo. A excepción del Sevilla, el Barça ganó todos los encuentros, incluido un 0-4 en el Santiago Bernabéu. Neymar se sentía importante y brilló con luz propia. Ahora vuelve a ocurrir algo similar. 

Messi está lesionado y Neymar está llamado a liderar al equipo. De momento, la respuesta del delantero brasileño ha sido sensacional, pues en el primer encuentro sin el argentino, marcó dos goles de los cinco goles del equipo.