CHAMPIONS LEAGUE 2015/16: BARCELONA-ARSENAL

Debate Wenger: Las siete vidas de Arsène

Hablamos con aficionados y periodistas ingleses. Así ven en el Emirates la crisis de Arsène Wenger en el Arsenal

Wenger seguirá al frente del Arsenal

Wenger seguirá al frente del Arsenal / AFP

DÍDAC PEYRET

Ni siquiera Arsène Wenger es ajeno al debate en el Emirates. Más aún tras los resultados de las últimas semanas. El paso de los años ha desgastado la figura -en ocasiones inmaculada- del francés. Lo explica el periodista de ‘The Telegraph’, Matt Law. “Con Wenger se da un fenómeno muy interesante. Cuando aterrizó representaba la llegada de modernidad, ahora tiene elementos de un fenómeno old fashion” [demodé]. 

“La cultura inglesa”

El francés todavía representa algunos valores de la antigua Premier -la apuesta por un proyecto- pero también el abuso de poder de la figura del mánager.  “Quizás no ha llegado tanto a España, pero ha recibido críticas brutales. Ocurre, también, que en Inglaterra hay una cosa cultural de no expresar todo lo que uno siente y a veces esas voces discordantes no se reflejan en el Emirates”, intercede Guillem Balagué, periodista de ‘Sky Sports’.

De algún modo hay una fractura generacional. Los jóvenes, los que no vivieron la versión más ruda del Arsenal, no comparten la veneración por el francés. El ruido sobre su trabajo en las Redes es enorme. Pero todavía hay un grupo importante de aficionados más veteranos que se fruncen el ceño cuando se pone en duda el trabajo del técnico. “Why shouldn’t I trust my manager? It’s not all about winning”.  (¿Por qué no debería confiar en mi entrenador? No todo va de ganar).

La frase es de un socio ‘gunner’ que baja a toda velocidad por las escaleras del Emirates tras el Arsenal-Barça. Se llama Robert Smith y no es precisamente el cantante de The Cure. Su imagen casa perfectamente con el estereotipo de aficionado inglés. 

“Él nos trajo el fútbol bonito, nos dio otro estilo y nueva identidad”, añade un ‘supporter’ a pocos metros acompañado de sus dos hijos, que caza la conversación. Hay señales que reflejan la creciente división de opiniones.

Unas de las pancartas más conocidas del Emirates, “In Arsène We trust” ha tenido una segunda versión mucho más agria (“In Arsène We rust”).  Es decir, del verbo confiar se ha pasado al verbo oxidar. Y el último puñal al técnico ha sido aún más crudo: "Thanks for the memories, but it's time to say goodbye" (Gracias por los recuerdos, pero ha llegado la hora de decir adiós".

Pendientes de Pep

Para algunos aficionados ‘gunners’ la decisión de Guardiola de decantarse por el City ha sido todo una decepción. Pero la clave esta temporada es el papel en la Premier. 

“Ahora te diría que la confianza de la gente está al 50%. Haber ganado cuatro títulos en los últimos años le ha ayudado, pero el problema es que éste tenía que ser el año del Arsenal en la Premier. Si no la ganan, el tanto por ciento pasará a un 70-30. La Champions no es la prioridad”, resume el periodista Matt Law. Henry suena ahora incluso como relevo del francés a final de temporada.

En las últimas temporadas, y una vez gestionado el gasto histórico del Emirates, Wenger ha dado un giro en la política del Arsenal con incorporaciones de peso como Özil o Alexis. El runrún había sido cada vez más insportable en los últimos años (“Spend some fucking money”, “gasta el jodido dinero”), le habían llegado a cantar al técnico.

“Hay que reconocerle el milagro de construir un estadio de 500 millones en plena crisis y seguir siendo competitivos”, intercede Balagué. “Su gran aportación fue cambiar la Premier y darle una identidad atractiva al aburrido Arsenal, que es cómo se le conocía antes”.

Han pasado 20 años y Wenger lucha por mantener su vigencia en el viejo nuevo Arsenal. Las críticas crecen a medida que pasan las semanas.