Courtois y Javi Martínez, las bombas de Zubi

Las revoluciones y apuestas arriesgadas no acostumbran a formar parte de la filosofía de Zubizarreta. Y este verano tampoco parece propicio para grandes cambios existenciales. Aquellos que vaticinaban que el Barça acabaría yendo al mercado en busca de fichajes contados y siempre moviéndose en el entorno lógico y habitual del director deportivo blaugrana parece que han acertado de lleno.

De entrada, la consigna de Zubi de cara a la política de refuerzos para el Barça 2014-15 invita a dirigir el grueso de la partida de fichajes en busca de dos incorporaciones de perfil joven y contrastados en el fútbol de elite y, a ser posible, en la Liga española. Nada de operaciones arriesgadas. En este contexto se enmarcan tres operaciones que a día de hoy ocupan a los técnicos. La primera, aunque parezca insólita con la llegada de Ter Stegen, tiene a Courtois como protagonista. La segunda hace referencia a un viejo conocido, Javi Martínez y la tercera sigue planeando sobre Laporte.

En el caso del belga solo se ha producido un movimiento inicial, aunque muy significativo. Un directivo del Barça ha sondeado al entorno más directo del portero para calibrar la predisposición a abandonar el Atlético Madrid y pelear con el Chelsea en busca de un traspaso razonable que le acercara al Barça. Tal y como informó esta redacción hace semanas, son varios los técnicos que recomiendan acompañar la llegada del meta alemán con otro portero de plenas garantías. O un segundo veterano pero en plena forma, como Willy Caballero, u otro cancerbero de primera línea, Courtois.

El tema de Javi Martínez obliga a retomar los hilos de pasadas temporadas. El actual jugador del Bayern Múnich no es un pilar imprescindible con Guardiola en el banquillo teutón. Ha acumulado minutos, pero en partidos importantes ha sido uno de los suplentes de lujo. El Barça entiende que podría negociar un traspaso importante pero sin llegar a los 40 ‘kilos’ que en su día ingresó el Athletic. Con Javi Martínez, se mantendría la filosofía de las últimas temporada. Otro fichaje versátil con opciones de apuntalar el centro de la defensa o el centro del campo. El recambio de calidad de Song.

La tercera alternativa es la que está menos clara. Laporte es objeto de seguimiento desde hace más de un año y no se puede cuestionar que el salto de calidad en la presente campaña ha sido significativo. Se trata de uno de los centrales zurdos con mayor proyección del mercado. Sin embargo, su pertenencia al Athletic y la negativa permanente de su presidente, Josu Urrutia, a negociar la salida de los baluartes del equipo hace muy inviable la firma de Laporte. La cláusula de rescisión asciende a 36 millones de euros y si a esta cantidad se añade la correspondiente fiscalidad, la operación se dispara por encima de los 40 ‘kilos’. Un precio desorbitado para un futbolista todavía en proceso de maduración.

Zubizarreta quiere finalizar la temporada y arrancar el Mundial de Brasil con una parte sustancial de la remodelación atada. En el club están tranquilos y aseguran que el mercado no se reactivará hasta el mes de agosto. Un período en el que se presentarán numerosas oportunidades de retocar la plantilla a precios bastante más ajustados que los actuales. Además, los técnicos insisten en que forzar las operaciones en estos momentos es contraproducente y más si tenemos en cuenta que el capítulo de salidas no está cerrado y se desconoce la partida final destinada a fichajes. Zubi pide cautela y no dejarse arrastrar por las presiones de la afición y la prensa.