¡El Barcelona B, a Segunda División!

Aleñá lideró al equipo hacia Segunda División

Aleñá lideró al equipo hacia Segunda División / sport

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

La Segunda División vuelve a abrir sus puertas de par en par al Barcelona B. Solo dos años más tarde de haber perdido la categoría, de la mano de un Gerard López al que le entregaron las llaves de un equipo al que ha sabido extraer todo su potencial para devolverle a "la máxima categoría en la que puede estar", como dijo el  propio técnico el pasado viernes.

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FINAL PLAYOFF ASCENSO SEGUNDA DIVISIÓN (VUELTA)

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Alineaciones
FC BARCELONA B
Suárez, Palencia, Marlon, Martínez (Abel Ruiz, 80'), Cucurella, Sarsanedas, Aleñá, Gumbau, Alfaro, Romera (Xemi, 72') y Marc Cardona (Borja López, 87').
RACING SANTANDER
Iván Crespo, Gándara, Samuel, Mikel (Carlos Álvarez, 46'), Julen, Santi Jara (César Díaz, 46'), Jagoba Beobide (Sergio Ruiz, 70'), Borja Granero, Héber, Álvaro Peña y Dani Aquino.

Lo sencillo sería explicar que el filial blaugrana hizo bueno el 1-4 de la ida, pero sería un análisis corto porque el equipo hizo mucho más. Los once que saltaron al campo hicieron un partido que explica, en noventa minutos, la evolución que ha experimentado este grupo de jugadores en dos temporadas. De dar la impresión que el descenso a Tercera podía convertirse en realidad en el primer año de Gerard, a plantarse ante un Racing de Santander con las ideas tan claras de cómo finiquitar el playoff que los cántabros ni siquiera hicieron cosquillas. Una exhibición de madurez, control y personalidad impropia de un filial. No es sencillo.

El partido fue lo que el Barça B quiso, que era todo lo contrario de lo que quería y habría venido a hacer el Racing. Los exPrimera necesitaban otra cosa, una marcha más en todos los sentidos, que pasaran cosas. Pero el dibujo del filial y su  interpretación del mismo fue casi perfecto. No dieron opción a su rival durante la primera mitad. El 1-4 ayudaba, sí, pero había algo más: la convicción de estar en la línea correcta, de ejecutar de forma inmaculada lo que se quería ejecutar.

Tanto fue así que las mejores ocasiones, al contrario de lo que podía preverse, fueron del Barça B.  Una volea desde  fuera del área de Aleñá  a  la salida de  un córner. Dos  centros  de Cucurella desde la izquierda, otros tanto de  Palencia por la  derecha. Un disparo desde fuera del área de Romera. Si el objetivo hubiera sido otro, el Barça B también habría llegado a él.

El Racing le daba el balón a Borja Granero, el mejor  de su equipo, en busca de un milagro que, con el paso de los minutos, no habría podido hacerse realidad ni con la ayuda de quien multiplicaba peces y panes. Un disparo del capitán demasiado cruzado dentro del área y poco más. Muy poco  más. Mucho debía cambiar el dibujo en la segunda parte. 

Lo intentó Ángel Viadero con dos cambios desde el vestuario. Quiso dar más intensidad al equipo, algo más de mala leche. El Barça B, como si nada, siguió sin inmutarse. Y, de hecho, tuvo la mejor ocasión del partido a la contra.  Cesión de Romera para Marc Cardona, que, a puerta vacía, envió alto. 

Pero el Racing quería más, encontrar la manera de cambiar el argumento sobre el césped. Aquino, tras una jugada larga y colectiva de los cántabros. Probó a Suárez. También el asturiano estaba ayer presente, atento y seguro. La sacó con el pie en la que fue la mejor ocasión del rival blaugrana. Ya se jugaba el primer cuarto de hora de la segunda. Respondió Romera con un cabezazo alto. 

La inercia llevaba a unos a defenderse y a otros a atacar más. Quien interpretara mejor su papel, saldría vencedor. Y sobre el césped el Barça B lo hizo de Oscar. Cada vez mejor, sabiéndose vencedor de la batalla mental y futbolística ante un Racing que fue diluyéndose a medida que se acercaba el final. 

El final fue una fiesta. Una explosión de alegría, un dejarse ir del equipo, de su cuerpo técnico, del palco... Del Mini Estadi, que no se llenó, pero que cantó el himno del club orgulloso en comunión con su segundo equipo. El año que viene, el Barcelona B estará en Segunda División. Otra vez en el sitio que merece.