El Barça hará un homenaje a Carles Puyol

Carles Puyol tendrá el reconocimiento popular que en su día no se le tributó. Aún es pronto para hablar de fechas, rivales y todo lo que conlleva este tipo de festejos, pero al menos existe el compromiso firme y en público de habilitar un días especial a la figura del eterno capitán blaugrana de la última década. Así lo entiende el presidente Josep Maria Bartomeu.

“Es evidente que Puyol sí se merece un homenaje, un gran reconocimiento en el Camp Nou. Se trata de uno de los grandes referentes del club”, señaló. El máximo directivo blaugrana asume el reto, aunque no esconde que el futuro acto todavía está muy verde en cuanto a organización y diseño. “En su día ya lo hablamos y solo es cuestión de encontrar la fecha adecuada. La estamos buscando”.

Puyol colgó las botas sin hacer ruido. Apenas una rueda de prensa de lo más discreta y un posterior acto emotivo. Poco bagaje para un personaje con un palmarés inigualable. Ayer, desde estas páginas, un ilustre culé como Carles Sans clamaba en favor de un homenaje popular apelando a tres calificativos que solo están al alcance de unos escogidos: “Esfuerzo, compromiso y sentido de la responsabilidad”.

Carles se identifica al 100% con todos ellos. Valores más que justificados para sortear cuantos obstáculos sean necesarios hasta dar con evento a la tremenda altura de todo aquello que el defensa de La Pobla de Segur ha brindado durante su dilatada carrera vistiendo la camiseta del Barça.

Es justo reconocer que si existe un equipo con serios problemas de fechas disponibles, ese es el Barcelona. El club todavía debe rendir cuentas a varios amistosos pendientes y enmarcados en numerosas operaciones de fichajes. Encuentros estipulados y que contemplan fuertes penalizaciones en caso de no disputarse. Con independencia del calendario deportivo, el Barça está obligado a dar con una solución concreta y que permita convocar el Camp Nou de las grandes ocasiones, el feudo repleto y con las gradas entregadas en favor de un futbolista único.

Como casi siempre, la UEFA ayuda muy poco o casi nada en este tipo de acontecimientos. Y es que más de uno podría pensar que una gran eliminatoria de Champions League frente a un rival de primera línea, que congregue a todo el barcelonismo, podría ser un marco idóneo para que Carles Puyol se despidiera como merece de la que ha sido su afición durante toda su carrera futbolística. Idea descartada de antemano. El máximo organismo del fútbol europeo tiene prohibidos los reconocimientos en partidos de competición europea. El Barça tendrá que exprimir a fondo su calendario para dar con la fecha adecuada.

Lo trascendental es que el homenaje a Puyol deje de ser una promesa almacenada para convertirse en una realidad tangible y en un plazo de tiempo breve. El barcelonismo así lo reclama. El adiós del defensa blaugrana conlleva un significado especial y el Camp Nou tiene la obligación de rendirle una despedida para enmarcar. El presidente Bartomeu asume el compromiso y solo falta que traslade esta petición a todos aquellos implicados para que el sueño sea una realidad.