LA ESTRATEGIA, ASIGNATURA PENDIENTE DE LOS AZULGRANA

Los nuevos traen al Barça de cabeza

El Barça de Luis Enrique ha salido beneficiado en cuanto a centímetros tras los fichajes y las ventas de este verano. Pero para mejorar a balón parado también hace falta actitud, y los nuevos la tienen

El Barça de Luis Enrique tiene argumentos para ser fuerte a balón parado

El Barça de Luis Enrique tiene argumentos para ser fuerte a balón parado / sport

Toni Juanmartí

Este año no hay excusa. El balón parado debe dejar de ser el talón de Aquiles del Barça. El conjunto de Luis Enrique ha salido beneficiado en cuanto a centímetros tras los fichajes y las ventas del verano. Además, las incorporaciones tienen la actitud necesaria para hacer fuerte al equipo en las acciones de estrategia.

Víctor Valdés, Pinto, Puyol, Cesc, Alexis y Tello promedian un 1,78 de altura, mientras que la media resultante entre Ter Stegen, Bravo, Masip, Mathieu, Rakitic, Deulofeu, Rafinha y Luis Suárez es de 1.83.

Bajo palos, el 1.89 de Ter Stegen y el 1.85 de Claudio Bravo mejoran el 1.83 de Víctor Valdés. El guardameta alemán y el chileno tienen que hacer valer su envergadura para dar seguridad en las salidas en córners y faltas laterales. De hecho, ese aspecto es de los pocos que se le pueden criticar a Valdés.

De Jérémy Mathieu hay poco que decir. El francés es un auténtico portento físico. Mide 1.90 y en su etapa como jugador del Valencia ya ha demostrado que es un seguro de vida a balón parado, tanto defensiva como ofensivamente.

En el caso de Ivan Rakitic (1.84), la aportación del croata a balón parado es más a nivel de asistencias. En el Sevilla el encargado de ejecutarlo prácticamente todo, destacando por su magnífico golpeo. Además, en el centro del campo siempre pelea los balones en largo del meta rival, una función que hacía a la perfección en su día Seydou Keita.

Rafinha viene a ser un 'nuevo Larsson' en ese sentido. El delantero sueco sólo medía 1,77 pero era un peligro por arriba. El centrocampista hispano-brasileño, que mide exactamente lo mismo que Larsson, tiene un muy buen golpeo de cabeza y además es muy intenso en la pelea de balones aéreos. El año pasado, en el Celta, marcó varios goles de cabeza llegando desde la segunda línea.

Por último, el carácter de Luis Suárez (1.81) también ayudará al Barça a ser más potente en las jugadas de estrategia. A nivel ofensivo, porque el uruguayo siempre sale vencedor de las 'guerras' que se producen instantes antes del golpeo del balón, lo que le permite ganar una buena posición para el remate. Y a nivel defensivo, porque la intensidad con la que Suárez vive el fútbol hace que sea una auténtico 'pesado' en los marcajes.

Ante partidos de máxima igualdad es clave poner los cinco sentidos en las jugadas a balón parado, porque pueden valer puntos e incluso títulos. Y si no, que se lo pregunten al Atlético de Madrid.