Barça, como tirar la Liga contra los modestos

El Barça-Eibar (4-2) simbolizó lo que ha sido el equipo de Luis Enrique en la Liga. Un conjunto sólido y casi imbatible para los rivales de mayor potencial, pero irregular y vulnerable frente a los modestos. El precio que pagó, el título que heredó el Real Madrid.

Sabor amargo

La ‘gent blaugrana’ abandonó el Camp Nou con un sabor amargo, un punto disgustada. El Barça-Eibar resumía casi a la perfección la irregular trayectoria del  equipo en la Liga.

La ‘era Luis Enrique’ se puede cerrar con un título, el de la Copa del Rey; pero la sensación es que Messi, Suárez, Neymar, Iniesta y compañía dilapidaron ante los rivales modestos el crédito ganado en el cara a cara contra sus ‘iguales’ hasta saltar la banca.

Frente al Eibar las opciones blaugrana en el campeonato eran realmente pocas; pero Barça y Real Madrid las anularon de un plumazo con el 0-1 de La Rosaleda (2’) y el 0-1 del Camp Nou (7’). Es decir, casi desde la caseta. 

Más de lo mismo

Quedó la sensación de que unos y otros siguieron fieles a su papel hasta el final. El Real Madrid, mostrándose más regular y fiable con independencia de que jugaran los titulares o la denominada ‘segunda unidad’.

El Barça, acusando excesivamente las rotaciones unas veces, y naufragando cuando sus estrellas -la MSN, sobre todo- no tenían el día, demostró que en esta ocasión no podía estar a la altura de su rival..

Muchos para elegir

El sufrido 4-2 contra el Eibar, todo un señor equipo, reafirma la sensación de que el Barça, en esta campaña, ha vivido una suerte de involución.

No resulta difícil encontrar un partido para señalar el día en el que el Barça se dejó la Liga. Por ejemplo, los dos contra el Málaga (0-0 y 2-0) que le restó 5 de los 6 puntos en juego. También, el 1-2 contra el Alavés en la tercera jornada. Por no hablar del 2-1 en Riazor con remontada del Deportivo incluida...

Sin nervio

Luis Enrique no consiguió que sus jugadores mantuvieran frente a esos rivales más asequibles el nervio competitivo que sí tuvo contra los ‘grandes: sumó 10 victorias y 4 empates (34 de 42 puntos) frente a Athletic Club, Atlético, Valencia, Sevilla, Real Sociedad, Real Madrid y Villarreal.

Un equipo que siempre había competido se volvió intermitente, imprevisible. Y en esa falta de fiabilidad perdió la identidad y, de paso, la Liga en beneficio del Real Madrid.

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