FC BARCELONA - FICHAJES

Arda Turan: "¡Olé, me sale como a Xavi o Iniesta!"

El jugador llega hoy a Barcelona desde Estambul, la ciudad en la que es una auténtica institución

Frank Rijkaard moldeó a un joven Arda para que explotara su talento en punta

Frank Rijkaard moldeó a un joven Arda para que explotara su talento en punta / sport

Carles Cuadrat*

Conocimos a Arda Turan en el verano de 2009. Llegábamos a Estambul Johan Neeskens, Albert Roca y Carles Cuadrat de la mano de Frank Rijkaard, para formar parte del nuevo Cuerpo Técnico del Galatasaray, y lo primero que oímos de Turan era que el presidente del club quería hacerlo capitán del equipo. Con tan solo 21 años, y en una plantilla llena de internacionales por Turquía y de ilustres veteranos extranjeros. Este dato habla de lo que significaba ya de bien jovencito este jugador. Un crack de la casa, aficionado enfervorizado desde pequeño de los colores del Galatasaray, con una tremenda personalidad, pero al mismo tiempo un hombre que el club quería preservar porqué dado su potencial temían que algún otro de los grandes clubes turcos (Fenerbahce o Besiktas)  pusiera mucho dinero por él y quisiera llevárselo. 

Arda demostró desde el primer día ser un líder natural y un gran capitán. Recuerdo que siempre se ponía a correr a mi lado en los calentamientos, e intentaba, en su por entonces básico inglés contarme cosas del país y “negociar” para sus compañeros la intensidad de carrera que les iba a exigir. Turan es muy trabajador y sacrificado, pero puedo entender su reciente comentario humorístico sobre lo mucho que les hace correr Simeone, porqué esa es parte de su manera de expresarse y de su modo jovial de hablar de fútbol. Sin malicia y sin crítica, solo un comentario divertido de una persona con mucha gracia en las distancias cortas.

Por cierto, hablando de idiomas, cuando me lo he vuelto a encontrar por Madrid, siempre le he preguntado por su español y no ha sido nunca posible arrancarle más de dos palabras en tono de cachondeo. Así que, en Can Barça, no esperemos demasiadas alegrías con el catalán. Los idiomas no son su principal habilidad.

En ese sentido, también resulta ahora especialmente significativo recordar como en los rondos de calentamiento, cuando se hacía un buen intercambio de pases y se gritaba “Olé”, el enseguida nos miraba a Albert y a mí y nos decía “como Xavi! como Iniesta!!”. Jajaja no tengan ninguna duda, Arda es un enamorado del juego del Barça, desde pequeño, y para él poder jugar contra ellos en España, disputarles Ligas y finales como ha ocurrido en estos últimos años, es algo muy especial. Fichar y ser jugador del club azulgrana será para él la culminación a una carrera de ensueño.

Esa temporada 2009-2010 el equipo empezó como un tiro de la mano de Rijkaard. Frank adaptó el exitoso 4-3-3 del Barça a la formación turca, y durante los primeros meses la delantera formada por Arda Turan, Milan Baros y Harry Kewell, se hinchó a marcar goles y dar espectaculo. Se le marcaron 4 goles a Trabzonspor en Liga, 3 al Besiktas, 4 en el Olímpico de Atenas al Panathinaikos de Cissé en partido de EuroLeague... Recuerdo algunas portadas muy expresivas (así son en los medios turcos) con dibujos de Frank como un mago con chistera y sacando de ella goles y récords como quien saca conejos. 

Arda venía de jugar como interior derecha en un 4-4-2, durante la última liga que había ganado el Galatasaray, en 2008. Y antes, durante su cesión al Manisaspor cuando solo contaba con 18 años, había sido un carrilero de banda con mucho recorrido. Pero para nuestro sistema de juego ‘made in Barça’, a Arda se le dio un trabajo nuevo como extremo izquierdo, ya que el australiano Kewell funcionaba muy bien por la banda derecha para poder entrar a pierna cambiada y usar su potente disparo a portería desde allí. Arda se comprometió con el grupo, y dio un gran rendimiento sacrificándose en esa posición nueva para él. Fue Frank Rijkaard quien consiguió sacarle un mayor rendimiento ofensivo ya que sus mejores números como profesional, con 11 goles y 26 asistencias (un total de 37 goles viniendo por acciones suyas), fueron esa primera temporada de Frank en el banquillo turco. Y eso que se lesionó y se perdió bastantes duelos importantes. Con el tiempo, ese rol finalizador ha ido menguando (solo hace falta ver los números de estos últimos años), y con Simeone se ha ido convirtiendo en un jugador más de sacrificio en medio campo, organizador, con muy buena salida de balón.

Con la entrada del año tuvimos una lamentable racha de lesiones de larga duración y perdimos a nuestros hombres de arriba. Intentamos reforzar esas posiciones durante el mercado de invierno, trayendo desde Inglaterra al internacional brasileño Jo Alves y al jovencito ex Barça Giovanni Do Santos, pero los registros goleadores nunca volvieron a ser los mismos.

La segunda temporada en Turquía ya empezó de manera más complicada para nosotros. No se pudieron hacer los fichajes que se le pidió a la Directiva, y además se perdieron varios jugadores importantes que el Cuerpo Técnico quería mantener. Arda Turan seguía con sus problemas de abductores y no pudimos contar demasiado con él. En el momento de nuestro cese, a la hora de la despedida, el mismo Arda me confesó que tras la gran alegría personal que le supuso el fichaje de Rijkaard por el Club, se sentía en deuda con nosotros por no haber podido ayudar más al proyecto, ser más protagonista. El bueno de Arda atravesó una mala racha de lesiones, y eso le pesaba en el alma porqué sentía que con él en el campo esa segunda temporada (solo jugó 12 partidos de Liga) las cosas podían haber ido mucho mejor. 

Los siguientes meses fueron importantes en la vida de Arda. Ya en España, pude leer en prensa que Turan había agredido a un periodista, que apenas jugaba (esa temporada, la anterior a su firma por el Atlético fue muy tensa tanto para él como para el equipo), que tenía continuos problemas debido a su gran fama en un país. Empezó a salir con una conocida actriz turca, y los paparazzi les seguían día y noche allí donde fueran. Se decía de él que era el Beckham turco. Creo que fue entonces cuando decidió salir. Y que entendió que la Liga española era un buen lugar para desarrollar su juego y para poder enfrentarse a ídolos que eran referentes para él, aquellos sobre los que siempre nos hablaba; Messi, Xavi, Iniesta, Pedro, Busquests, Cesc...

Por esos días Albert Roca recibió una llamada de una radio madrileña mostrándose escépticos por el hecho que el semi-desconocido jugador turco podía firmar por el equipo rojiblanco. Albert se encargó de animar a los aficionados y pronosticó el buen rendimiento que ha dado Arda diciéndoles que si las lesiones le respetaban, el turco sería ídolo en Madrid y daría muchas tardes de buen futbol a su afición.

Hay que entender que Arda es un auténtico ícono en su país. Ha sido escogido “Deportista del Año” en 2013, cae bien a todo el mundo, realiza anuncios constantemente, capitán con su Selección. Quizás esa sea la gran pena en la carrera de Arda. Siendo jugador importante, con tan solo 20 años, en el equipo que alcanzó sorprendentemente las semifinales de la Eurocopa 2008, desde entonces esa brillante generación de futbolistas turcos no ha alcanzado ninguna cota relevante en el fútbol internacional. Ninguna presencia más en Mundiales ni Eurocopas. La generación de futbolistas que ganó el Campeonato de Europa sub-17 del año 2005 y quedó cuarta en el Mundial del mismo año, ahora, diez años después, no está consiguiendo ningún éxito colectivo para el país, y me consta, con lo patriota y pasional que es, le produce un gran dolor a un jugador tan competitivo como él.

En el Barça, Arda será el hombre más feliz de la Tierra trazando pases con Iniesta y Messi. Y una de sus mayores virtudes; sabrá transmitir esa felicidad innata a sus compañeros de grupo y a la afición.

*Carles Cuadrat fue ayudante de Frank Rijkaard en el Galatasaray