La apuesta defensiva de Luis Enrique para la remontada

Gerard Piqué ha de aportar en la vuelta un plus que no pudo dar en la ida en Turín

Gerard Piqué ha de aportar en la vuelta un plus que no pudo dar en la ida en Turín / VALENTÍ ENRICH

En el partido de vuelta del miércoles ante la Juventus en el Camp Nou habrá dos líneas en el equipo que asumirán una presión máxima en todos los sentidos. Una será la que forman el tridente más conocido del planeta, la MSN (Messi, Suárez y Neymar), responsables de marcar cuatro goles como mínimo para superar la eliminatoria. Y la otra será la encargada, junto a Ter Stegen, de dejar la portería a cero.

No hay duda de que los dos retos son igual de importantes porque sin los goles del tridente no habrá remontada pero sin el ‘cerrojazo’ defensivo tampoco.

El problema es que el equipo está dando claras muestras de fragilidad atrás en los úitimos partidos, como se constata en el hecho de que en los últimos tres partidos ha encajado siete goles. Sin duda, muchos.

El principal culpable es Luis Enrique, que en su afán para encontrar la piedra filosofal táctica que se adapte a sus jugadores ha ido variando de forma tan aleatoria como desconcertante de tres a cuatro defensas desde la debacle en París hace ya casi dos meses.

A día de hoy parece que la defensa de tres está perdiendo fuelle, sobre todo porque se asumen demasiados riesgos atrás. Todo apunta que el miércoles, el Barcelona saldrá con una línea de cuatro defensas bien definida, con dos laterales muy ofensivos y dos centrales con capacidad de sacar el balón.

Con Javier Mascherano entre algodones –hasta este martes no se decidirá si entra o no en la convocatoria–, Jérémy Mathieu totalmente desahuciado tras sus dos últimos nefastos partidos,  Aleix Vidal recuperándose de una lesión de larga duración y Digne en un papel más que secundario de figurante, parece claro que Luis Enrique solo cuenta con cuatro hombres para salvaguardar el próximo miércoles a Ter Stegen.

Así pues, Sergi Roberto, Gerard Piqué, Samuel Umtiti y Jordi Alba están llamados a consumar la hazaña de dejar la portería a cero. 

De los cuatro candidatos a ser llamados a filas para la batalla contra la Juventus, Sergi Roberto es el que ha llegado más en forma, ya que ha completado los dos últimos partidos a un gran nivel, sobre todo ofensivamente. Piqué y Umtiti ofrecen algunas lagunas defensivas en sus últimas actuaciones mientras que Alba ha sido uno de los grandes sacrificados por el 3-4-3.