Con Busquets volvió el equilibrio

Sancionado en el último partido de Liga, ante la UD Las Palmas, Sergio Busquets regresó al once inicial del Barcelona para medirse al Arsenal en la ida de los octavos de final de la Champions y con el centrocampista en el campo, el equipo volvió a adueñarse del juego con una autoridad incontestable. 

Y sin embargo,  Luis Enrique estuvo a punto de quedarse sin Busquets en el ecuador de la primera parte: Busquets se lanzó al suelo para pelear un balón dividido y acabó tocado, con un golpe en la cadera que le llevó a pedir el cambio.

El técnico del Barça resopló en un gesto de resignación, pensando ya en jugar más de una hora sin su gran referente en el centro del campo. Se pusieron a calentar Sergi Roberto y Mathieu sin demora, y cuando el francés ya estaba dispuesto a salir al campo, Busquets envió un mensaje tranquilizador a su banquillo.

"Espera, espera", comentó Busquets al médico y a los fisios del Barça. Con Mathieu ya listo para sustituirle, Busquets comprobó que apenas quedaba un suspiro para el descanso y resistió en el césped pese al dolor.

En la segunda parte, el centrocampista del Barça ni siquiera amenazó con pedir el cambio: ya recuperado del golpe, contribuyó decisivamente a que la segunda mitad fuese casi un monólogo del Barça. Aportó el equilibrio y el control que el Barça no había tenido en su último partido de Liga, en Las Palmas. 

Acompañado de Iniesta y Rakitic, Busquets fue decisivo para evitar que el partido se convirtiese en un correcalles cuando el Arsenal intentó estirarse. 

Busquets tuvo que estar pendiente del juego entre líneas de Özil, pero también de la presión en el centro del campo de Coquelin, posteriormente sustituido por Flamini, y de las llegadas al área rival de Ramsey. 

Con su regreso al equipo, el Barça volvió a disfrutar de una salida de balón mucho más limpia que en partidos anteriores. El jugador de Badia combinó con Piqué y Mascherano en el inicio de la jugada, pero también con los interiores y los delanteros para dominar el partido con solvencia.

Tras el primer gol de Messi, en el minuto 71 del partido, Busquets fue decisivo a la hora de mantener la posesión del balón y de intentar frenar los intentos desesperados del Arsenal por empatar el partido. 

Con el segundo, también obra de Messi en el minuto 83, el Barça supo mantener el dominio del partido: sostenido por Busquets, Neymar pudo marcar el tercero en el último minuto del partido, pero Cech envió su remate a córner. 

Ante el Levante y la UD Las Palmas, los dos últimos partidos fuera de casa en los que el Barça sufrió especialmente, Busquets no fue titular. En en Insular, de hecho, ni jugó. Y en ambas ocasiones el equipo lo echó de menos.

Pero su regreso ante el Arsenal fue todo un alivio para el equipo blaugrana, que se impuso en Londres (0-2) y ya piensa en los cuartos de final de la Champions.