'Air Paulinho'

Rakitic tenía el monopolio casi en exclusiva del gol en la segunda línea en un equipo en el que Messi, Neymar y Suárez acaparaban celebraciones.

La marcha de Ney y la llegada de Paulinho ha modificado el ecosistema sensiblemente. A falta de más información, dos conclusiones pueden extraerse ya de la presencia del centrocampista en el equipo: Paulinho no es el jugador torpe y exclusivamente defensivo que muchos habían vendido y el equipo gana llegada desde atrás.

Titular en Montilivi, el fichaje por el que Robert insistió hasta convencer al club de que debía pagar 40 millones de euros por él estuvo a punto de sumar su tercer tanto de blaugrana, repitiendo el cabezazo con el que marcó ante el Eibar en el Camp Nou. Esta vez el balón no vio puerta, pero el brasileño confirmó lo que parece será una constante cuando forme parte del equipo: habrá más goles llegando desde atrás y gracias a su poderío en el juego aéreo y clarividencia en las jugadas a balón parado.

Esta es una de las facetas del juego en las que el Barça había mostrado más deficiencias las últimas temporadas. De hecho, Piqué, tras la marcha de Puyol, se hizo en exclusiva con la responsabilidad de rematar córners o faltas laterales. El central es también un especialista en el juego aéreo, tanto en defensa como ataque, pero ahora cuenta con un socio que hará más complicado defender a los blaugrana en este tipo de jugadas.  La estrategia, pese al esfuerzo de Unzué como ayudante de Luis Enrique, se había descuidado últimamente, en parte, por la ausencia de especialistas. Paulinho ayudará a recuperar un aspecto clave en partidos cerrados.

libertad total

Ernesto Valverde, más allá de las consignas a nivel defensivo trasladadas a Paulinho para que ayude a juntar líneas y cerrar espacios, también ha dado libertad de movimientos en ataque para reforzar la llegada desde la segunda línea. El técnico es consciente de que el brasileño puede aportar muchísimo al equipo en ese sentido.

De hecho, ya ha marcado dos goles, el último de ellos de cabeza, una de sus especialidades. En su carrera como profesional, sumando los clubs por los que ha pasado y la selección brasileña, suma 18 goles conseguidos rematando de cabeza. Desde que empezó a jugar en el Corinthians y hasta el día de hoy alcanza 74 tantos (15 con la testa) en competiciones de clubs y 10 más con Brasil (3 de cabeza). En total, 18 de 84, más de un 15%. Ante todos ustedes: ‘Air Paulinho’.