Las notas del partido

El 1x1 del Barça-Bayern

El Barça dio un gran paso hacia la final de la Champions tras golear al Bayern en una noche mágica e inolvidable. Estas son las notas del partido

El Barça goleó al Bayern en un partido apasionante

El Barça goleó al Bayern en un partido apasionante / sport

Ricard López

TER STEGEN (7). Atinado: Resolvió bien las pocas ocasiones que el Bayern le puso en apuros. Se prodigó con su buen juego de pies, ayudando a sacar el balón jugado desde atrás.

ALVES (8). Determinante: Fue de menos a más, hasta el punto de acabar siendo decisivo. Dio el pase a Messi que acabó en el 1-0, después de una brillante recuperación al borde del área rival, con caño incluido. Pecó de precipitación al principio, pero luego se entonó. Sus subidas al ataque -falló incluso un gol cantado ante Neuer en el 40'- dieron muchos problemas a la defensa alemana. En el 'debe', sus despistes pudieron costarle un disgusto al equipo. Vio la amarilla por derribar a Lewandowski al borde del área nada más empezar la segunda parte. No fue penalti de milagro. 

PIQUÉ (8). Sólido: Impreciso y fallón en los primeros minutos, tardó poco en tomarle el pulso al partido. Atento en el corte y preciso en el pase.

MASCHERANO (7). Disciplinado: El 'Jefecito' hizo honor una vez más a su apodo. Fue un referente atrás, derrochando entrega, y sus faltas tácticas evitaron más de un disgusto. 

ALBA (7). Hiperactivo: Incisivo y rápido en sus internadas por la izquierda.

BUSQUETS. Pulmón (7): Trató de poner orden en un duelo de alta intensidad. El Bayern no se lo puso fácil. Aportó equilibrio y fuerza en los momentos de mayor desconcierto. Se sacrificó en labores defensivas.

INIESTA. Incómodo (7): El juego directo de área a área, y la falta de control, hizo que el balón pasara por sus pies menos de lo deseable. Cuando lo tuvo, dio sensatez y aplomo. 

RAKITIC. Trabajador (7): Se sacrificó por el equipo, mostrando su cara más batalladora. Recuperó un sinfín de balones -uno de ellos, previo al 2-0-, y sus desplazamientos largos, abriendo el juego, dieron oxígeno al equipo. Tuvo pocas opciones para probar su potente disparo. Una actuación muy completa.

LUIS SUÁREZ (7). Fallón: No estuvo fino en el remate, pero a cambio se desfondó en la presión y la recuperación de balones. Brilló en tareas defensivas, pero le faltó acierto ante Neuer. El meta alemán le privó del 1-0 en un mano a mano, totalmente solo, a los diez minutos de partido.

MESSI (10). Salvador: Si alguien duda de su condición de número uno indiscutible del fútbol, que vea su partido ante el Bayern. Una exhibición 100% 'maradoniana', jugando en una posición más atrasada de lo habitual. Marcó los dos primeros goles del Barça en el último cuarto de hora, cuando todo presagiaba el 0-0 final. Y de qué manera. El primero, conectando un potente disparo desde el borde del área tras una buena recuperación de Alves. Y el segundo, a la contra, una auténtica obra de arte: dejó literalmente tumbado a Boateng con un quiebro eléctrico en el área, y superó a Neuer con una vaselina marca de la casa. Puso la guinda a su espléndida actuación dándole el 3-0 a Neymar en el descuento. No es de extrañar, por tanto, que al acabar el partido el Camp Nou en pleno coreara su nombre. No había para menos.

NEYMAR (7). Nervioso: Le puso voluntad, pero no fue su noche hasta que marcó el 3-0, ya en pleno descuento, después de que Messi le dejara solo ante Neuer en un contragolpe. Antes de eso, le faltó acierto en el remate -falló un gol cantado en el 15'- y en el uno contra uno. Se jugó la expulsión en el 70', por protestar airadamente una amonestación tras cometer una clara falta. Por fortuna, su calidad le permitió resarcirse de todos sus errores.

Entraron en los diez últimos minutos:

XAVI (7). Ordenado. Dio control al juego, ya con el 2-0, entrando en sustitución de Iniesta en el 82'.

RAFINHA (sc). Recompensado. Luis Enrique le dio minutos en la recta final para que pudiera enfrentarse con su hermano Thiago Alcántara. Al mayor de la saga le tocó vivir la cara amarga de la derrota.

BARTRA (sc). Testimonial. Entró por Mascherano con el tiempo casi cumplido.