El 1x1 del Atlético-Barça

TER STEGEN. Dubitativo (6).

Era su debut en Liga con la camiseta del FC Barcelona. No tuvo nada de trabajo en el primer acto, pero en la primera ocasión clara del Atlético –la que supuso el 1-0 de Torres- no estuvo fino. Se esperó bajo palos y no quiso salir. El resto del partido, tranquilo.

SERGI ROBERTO. Notable (7).

El de Reus está más que asentado en su “nueva” posición. Cumplió con su rol y no perdió la espalda en ningún momento. No tuvo nada que ver en el gol del Atlético y sigue demostrando a Luis Enrique su polivalencia en el terreno de juego.

MASCHERANO. Desafinado (5).

Al argentino se le notó con un punto menos de intensidad que a sus compañeros. Con un solo entrenamiento en sus piernas esta semana, acusó la fatiga de los compromisos internacionales y no ofreció su mejor versión. Falló en el gol del Atlético llegando tarde a la cobertura de Torres.

VERMAELEN. Desafortunado (6).

Tuvo que retirarse del terreno de juego en el minuto 25 por una lesión muscular en el sóleo de su pierna derecha. Mientras estuvo sobre el césped, rayó a su nivel habitual de esta temporada. Salvó algunos despistes puntuales de ‘Masche’.

JORDI ALBA. Seguro (7).

La banda izquierda fue suya. Cumplió, como casi siempre, en defensa y en ataque con sus subidas. Comenzó la jugada del segundo y definitivo gol del FC Barcelona con su pase entre líneas a Luis Suárez.

SERGIO BUSQUETS. Pulmón (7).

Es de aquellos jugadores que da gusto ver. No sale en los titulares, pero siempre cuaja buenas actuaciones. Destruyó las salidas rápidas del Atlético, recuperó muchos balones y permitió a su equipo jugar con total seguridad. El de Badia es imprescindible en el esquema de Luis Enrique.

RAKITIC. Intermitente (6).

No le pitaron un <strong>penalti claro de Giménez</strong> en los primeros compases del partido. Mateu Lahoz decidió no verlo. Además, tuvo el primero en sus botas, pero su disparo lo sacó Oblak. De más a menos. Luis Enrique le sustituyó y dio entrada a Messi en su lugar.

INIESTA. Generoso (7).

Mostró un nivel notable durante los 90 minutos. El capitán azulgrana organizó al equipo y distribuyó el juego a su antojo. Vio amarilla en el primer acto por derribar a Gabi. Se asoció con sus compañeros en la zona de creación y puso tranquilidad cuando el marcador era favorable.

NEYMAR. Brillante (9).

Estuvo eléctrico en el inicio de su <strong>partido 100 con el FC Barcelona</strong>. Le ‘ataron’ en corto y también le 'birlaron' un penalti. Fue en la segunda mitad cuando más brilló. Un golpeo magistral en un libre directo significó el empate en el Vicente Calderón.

LUIS SUÁREZ. Asistente (8).

Muy activo como siempre en ataque. Cayó a la banda en varias ocasiones y tuvo una de las oportunidades de peligro más claras de la primera parte tras estrellar un remate en el larguero. Fue el primero en presionar y dio la asistencia a Messi en el tanto de la victoria. Solo le faltó el gol.

RAFINHA. Luchador (8).

De los tres de arriba, fue el que menos chispa tuvo en la primera mitad. Tocó y tocó, pero la faltó cierta profundidad. Eso sí, no desfalleció en la segunda mitad y se sacrificó en la presión. Con la entrada de Messi, volvió al centro del campo y asentó el juego azulgrana dejando muy buenas sensaciones.

MATHIEU. Sobrio (6).

El francés entró para sustituir a Vermaelen en la primera mitad y no defraudó. Acertó en sus decisiones y cortó varias acciones de peligro del conjunto rojiblanco. Se entendió bien con Mascherano, a excepción del gol de Torres.

MESSI. Decisivo (9).

Su entrada en la segunda parte, justo tras el empate del FC Barcelona, le dio un plus de intensidad y movilidad al equipo y cambió por completo el panorama. Como siempre, <strong>acabó decidiendo el partido</strong>. El ‘crack’ argentino le dio los tres puntos al equipo azulgrana.

LUIS ENRIQUE. Inteligente (8).

Le ganó la partida por completo a Simeone en la primera parte. Comenzó sin Messi y optó por Rafinha. Tras el empate de Neymar, el asturiano decidió dar entrada al argentino y el equipo continuó dominando. Llegó el gol de Messi y el partido se acabó.