La posibilidad más cercana es el alquiler de la pista Mondo

El rival del Barça Intersport aún no tiene pista para jugar

El ARS Palma del Río trabaja contrarreloj para poder disputar el primer partido de sus 39 años de historia en la Asobal en el pabellón municipal de El Pandero ante el FC Barcelona

EFE

El ARS Palma del Río trabaja contrarreloj para poder disputar el primer partido de sus 39 años de historia en la Asobal en el pabellón municipal de El Pandero ante el FC Barcelona, debido a que aún no ha instalado la pista exigida por la Asociación de Clubes de Balonmano.

La superficie de la pista que utiliza habitualmente el equipo cordobés no reúne los requisitos técnicos que requiere la competición de la máxima categoría nacional, por lo que fuentes de la entidad palmeña han informado de que el club baraja dos opciones para sustituirla.

La posibilidad más cercana es el alquiler de la pista Mondo que en las últimas campañas ha utilizado el BM Antequera en el periodo en el que militó en la Asobal, pero el club malagueño pide una contraprestación de 10.000 euros por su cesión durante toda la temporada, una cantidad inasumible para el conjunto cordobés, recién ascendido y aún sin patrocinador.

El club es consciente de que la pista debe estar instalada como muy tarde el próximo miércoles, dado que se necesitan algo más de 24 horas para su asentamiento posterior, según las fuentes.

Además, el FC Barcelona, como cualquier rival, tiene derecho a entrenarse el viernes en el escenario del encuentro, el día anterior a la disputa del partido de la segunda jornada de la Asobal previsto para el sábado a las 19.30 horas.

De este modo, a cinco días del debut del ARS Palma del Río como local, aún no está confirmado que se pueda jugar en El Pandero, después de que el club haya superado los quinientos abonados para la campaña 2012-13.

La entidad cordobesa incluso ha vendido ya más de medio centenar de entradas para el partido ante el equipo azulgrana, en un encuentro para el que se prevé el primer lleno de la temporada, ya que el pabellón tiene un aforo de sólo 980 plazas, para lo que se han tenido que instalar una grada supletoria con 200 localidades.