La remontada ante el Kiel es posible

El equipo le necesita. ¡Vamos, anímese! No sea remolón… Desperézese y acuda esta tarde (18.30 horas) al Palau. Hoy ha de ser uno de esos días épicos. No se trata de un acto de fe ni de una cruzada imposible. Difícil, sí. Muy difícil. Pero el Barça Lassa puede conseguirlo. Sólo un equipo de la solvencia del azulgrana está capacitado para dar la vuelta a un <strong>marcador tan adverso como el que se trajo de su visita al THW Kiel alemán (29-24) en partido de ida de cuartos de final de la Liga de Campeones</strong>, último paso para acceder a la Final Four de Colonia los días 28 y 29 de mayo. El enigma se resolverá en un Palau que tiene que ser, una vez más, un fortín inexpugnable. Toca apelar a la magia de un escenario que quiere vivir su vigésimo tercera remontada histórica. Es posible. <strong>Nadie dice que será fácil… pero se puede conseguir. </strong>

La operación remontada ya está en marcha. Ayer mismo, Víctor Tomás, capitán del FC Barcelona Lassa, aseguró: “El Palau tiene que ser un jugador más”. La plantilla pide a la afición que empuje, que anime como si fuera una única voz. Todos en el equipo saben que enjugar una desventaja de cinco goles al coloso alemán –que puede ser de seis si el Kiel supera los 24 tantos en su marcador- precisará de un factor desequilibrante: la grada. “El Palau es importante y también, que nosotros juguemos un buen partido. Es necesario que los aficionados vengan y empujen; que acudan con la camiseta del Barça, que sean un jugador más, porque si alguien tiene que ponerse a defender o lanzar un penalti, necesitaremos de su ayuda. En este tipo de partidos, el público ha de jugar con nosotros”, explicó Tomás. 

aprender de los errores

aprender de los erroresEn el partido de ida, el Barça supo aguantar los arreones del equipo alemán hasta el minuto 42 (19-18). Después, el encuentro entró en una fase de desconcierto para los azulgranas que encajaron un parcial de 5-1 (24-19) para dejar el marcador en un desfavorable 27-21 a seis minutos del final gracias, en buena medida, a las acciones de Joan Cañellas, en la filas del conjunto alemán. Sólo la postrera reacción  del Barça sirvió para enmendar la plana. Los de Xavi Pascual se retiraron a los vestuarios  con un definitivo 29-24 en contra que aún da margen para la esperanza. 

¿Errores...? Los hubo. El equipo catalán tendrá que amarrar al extremo izquierdo teutón Dominik Klein, que acabó el partido con 9 tantos (7 de ellos en la primera parte) así como al exazulgrana Joan Cañellas (2005-2008), con 6 goles de 8 lanzamientos, que fue una verdadera pesadilla para la defensa azulgrana. En su opinión: “cuando jugaba en el Ciudad Real aprendí que una ventaja de cinco goles en el Palau puede desaparecer en pocos minutos. Es muy difícil sobrevivir allí y por eso el Barcelona sigue siendo el favorito”, dijo.  Lo peor de todo, sin embargo, fueron los 21 balones perdidos, que dieron alas a los teutones para escaparse en el marcador. En este sentido, Víctor Tomás reconoció que el partido de hoy “será muy complicado. Para lograr la remontada tendremos que hacer las cosas muy bien en todas las facetas del juego porque, de lo contrario, no conseguiremos nuestro propósito, que es estar en la Final Four de Colonia”. 

El capitán azulgrana incidió en la necesidad de “no perder tantos balones en las últimas acciones de ataque ante el portero, o los errores en el último pase para dejar jugadores solos, en los que no estuvimos bien. Las pérdidas hicieron que nuestros repliegues defensivos no fueran buenos y que nos marcaran muchos goles en la transición defensa-ataque, y creo que esto lo tenemos que mejorar mucho”. 

Admitió que ha conocido días grandes en el Palau, y “estamos animados. Es bueno que el equipo haya estado tocado anímicamente y sea consciente de la situación en la que estamos, que es límite. Es positivo, incluso, que la gente esté con un poco de temor, ya que hará que salgamos a morder, a dejarnos la piel. El equipo está preparado”. Ahora, solo falta usted...