Un genial Tyrese Rice marca el camino para tumbar al Real Madrid

Liderado por un inconmensurable Tyrese Rice, el nuevo Barça de Bartzokas se sobrepuso a todo y acabó noqueando al Madrid. Los azulgrana, vigentes, campeones de la Supercopa defenderán este sábado su condición de tales ante el Gran Canaria

Los dos transatlánticos de nuestro baloncesto se veían por primera vez las caras en el presente ejercicio. Algo que el Barça Lassa afrontaba con bajas y aún en plena fase de adaptación a los sistemas de Bartzokas. Para el primer cinco de la nueva era en competición oficial, el técnico griego apostó por Rice, Oleson, Perperoglou, Claver y Tomic, muy consciente de que el problema podría llegar en la dirección de juego con falta de relevos de garantías por la baja de Koponen.

En el Madrid, lo ya conocido. Intensidad atrás al límite y velocidad en ataque buscando el dentro-fuera para aprovechar tanto la amenaza de sus polivalentes interiores -yendo a por todas al rebote ofensivo- como el de sus tiradores. Su gran arma, Y por ahí empezó a sacar partido el colectivo de Pablo Laso que marcó las primeras diferencias desde más allá de los 6.75. El Barça buscaba dar réplica en un duelo donde la capacidad defensiva de ambos quedaba minimizada por el poder ofensivo. Y a intercambio de golpes, el Madrid suele salir bien parado. 

Con 20-18 Bartozkas pidió tiempo para reorganizar ideas y conceptos atrás y dio entrada a Navarro. Enfrente, Llull seguía haciendo de las suyas, como siempre, (22-18). La réplica del Barça llegaba por parte de Rice y Tomic en un duelo sin tregua jugado desde los banquillos también como una partida de ajedrez. Quien mejor moviera sus peones tendría mucho de ganado. Al final del primer cuarto, el intercambio de golpes estaba en tablas (26-26).

La incógnita era clara ¿aguantaría el ritmo el Barça?.La transformación del cinco azulgrana, con el descanso de Rice, propició que Navarro y Ribas se alternaran en la dirección. Bartozkas iba probando combinaciones tácticas. La cuestión era ser sólidos atrás y jugar con criterio en ataque optimizando los recursos disponibles. Y en la recta final del primer cuarto llegó el tirón de un Madrid cada vez más agresivo con Llull al mando de las operaciones. El Madrid logró un amago de break (48-39) pero el Barça logró llegar muy vivo al descanso (48-47).

El Barça presentaba déficits -por las ausencias- y falta de acoplamiento y la cuestión era saber si sería capaz de tumbar con  a la profunda plantilla del Madrid con Rice y Tomic como principales referentes.. Y los blancos volvieron a abrir brecha desde más allá de los 6.75, su defensa comenzó a propiciar pérdidas de balón y el Barça se vio comprometido de nuevo otra vez (59-51).

Pero el Barça Lassa volvió a renacer. con solidez atrás y clarividencia ofensiva, donde apareció Claver, los azulgrana firmaron un parcial de 0-14 yéndose hasta un 61-68. En ese  momento, Rice dio el susto cuando se retiró doliéndose de su rodilla. Si quería aspirar a ganar aquello, el Barça tendría que luchar contra todo (70-73 al final del tercer cuarto).

Todo se decidiría en el postrer período. Un esperanzador 70-76 lo equilibró en un plis plas el Madrid y vuelta a empezar para un Barça donde Claver se había puesto los galones. Cada posesión ya comenzaba a valer su peso en oro. El Barça llevaba la iniciativa pero tocaba rematar en la recta final. A 27" ganaba por 2 puntos y tenía posesión. Anotó Doellman (93-97). restaban 18 segundos. Falló e Madrid y Rice,, quien no sentenció. El Barça era finalista de la Supercopa.