Celebración a lo grande para el primer título importante de la temporada

Tras dos días de gran baloncesto en el Martín Carpena de Málaga, y ofreciendo una sólida imagen como equipo, el FC Barcelona Lassa pudo celebrar como debía el primer título importante de la temporada ACB. No es la Liga ni la Copa del Rey, pero la Supercopa que se ganó en Málaga bien merecía una celebración en pequeño comité por lo que significaba para este grupo.

Tras perder las tres últimas Supercopas ante el Real Madrid y quedarse sin ningún título la temporada pasada, era casi una obligación volver a levantar una copa y esta Supercopa Endesa, la sexta en el historial blaugrana, supo a gloria.

Y esa felicidad por el título se tradujo en una gran celebración por la noche. Cerca del hotel de concentración del equipo en Benalmádena, toda la expedición blaugrana se desplazó a un restaurante cercano donde el tradicional canto de “campeones, campeones” fue coreado por todo los jugadores y miembros del equipo hasta bien entrada la noche.

Al brindis de los capitanes Juan Carlos Navarro, Alex Abrines, se unó el técnico, Xavi Pascual, el responsable directivo de la sección, Joan Bladé y el director deportivo, Joan Creus. El resto levantaron sus copas y corearon los nombres de los jugadores, con un protagonismo especial para el MVP de la final, Pau Ribas

Una celebración que volvió a mostrar la cohesión de este grupo a pesar de las siete incorporaciones que han llegado esta temporada. Y uno de los más animados era el base checo Tomas Satoransky, feliz por haber sumado, al fin, el primer título ACB como blaugrana. Sin duda, el trabajo en grupo de las últimas dos semanas ha dado sus frutos y mostró a un equipo convencido que no será la última fiesta que celebren.

Tras la cena, Xavi Pascual dio libertad a los jugadores para alargar un poco más la noche. Algunos se fueron directamente a dormir y otros estiraron un poco más la fiesta de manera discreta. La única consigna era estar preparados para tomar el vuelo de regreso el domingo por la mañana. Las caras de felicidad de muchos de ellos seguían en el vuelo de regreso, aunque más de uno lo aprovechó para recuperar el sueño perdido…