El Mundial de atletismo de Eugene 2019 pende de un hilo

Atletismo

Sebastian Coe no se libra de las sospechas que persiguen al atletismo / AFP

Carlos R. Galindo

Carlos R. Galindo

Varios fiscales franceses investigan si hubo soborno en la adjudicación del Campeonato del Mundo de atletismo de 2019 que fue otorgado a la ciudad estadounidense de Eugene. Esos mismos fiscales buscan nuevas pruebas relacionadas con la ciudad anfitriona, dijo una fuente cercana al caso este viernes.

La investigación, que forma parte de un grupo de sondeos realizados por los servicios jurídicos franceses sobre la entrega de dinero a cambio de votos (favorables) en torno a la adjudicación de eventos deportivos en todo el mundo, examina las decisiones de la Federasción Internacional de Atletismo (IAAF) sobre los Mundiales de Eugene (2019), Londres (2017),  Pekín (2015) y Moscú (2013), dijo la fuente a Reuters.

Otras investigaciones en curso incluyen a dos ediciones olímpicas, concretamente la celebrada en Río de Janeiro en 2016 y los próximos de Tokio en 2020. "Seis miembros actuales o antiguos del Comité Olímpico Internacional (CIO) son sospechosos de recibir dinero a cambio de sus votos en eventos deportivos", aseguró esa misma fuente.

Entre los seis implicados destacan Frankie Fredericks, de Namibia, que dimitió el pasado martes de su puesto como jefe del equipo de evaluación de las candidaturas para los Juegos Olímpicos de 2024, y el ex presidente de la IAAF, el senegalés Lamine Diack, que ya está bajo investigación por corrupción después de haber sido acusado de recibir sobornos por omitir pruebas positivas de dopaje.

"La investigación se remonta  a las Finales Mundiales de Atletismo que tuvieron lugar en Stuttgart los años 2006, 2007 y 2008.

Según esa fuente, el senegalés Diack y su hijo Papa Massata Diack, que actualmente se encuentra en su país, aparecen "en el centro de la investigación". Fredericks admitió esta misma semana que recibió un pago de 300.000 dólares de Papa Massata Diack el día de la votación para elegir los Juegos Olímpicos de 2016, para destinarlos a promover el atletismo en África. El ex velocista negó cualquier acto ilícito.

El periódico francés Le Monde dijo esta semana que Papa Massata Diack recibió 1,5 millones de dólares de un empresario brasileño tres días antes de la votación para conceder los Juegos Olímpicos de 2016 a Río (en 2009). Ambos Diacks (padre e hijo) han negado repetidamente aceptar sobornos.