LA MIRILLA

Paciencia, aguantad hasta primavera

Albert Masnou

El Barça no tiene otra solución que aguantar un poco más. El calendario no da alternativa. El equipo de Guardiola superó una prueba de fuego importante en el Calderón y ahora empieza una nueva etapa en el campeonato de Liga en la que ni el Madrid ni el Barcelona cuenta con unos compromisos especialmente complicados. Será una travesía hasta el mes de abril con pocos altos en el camino.

Con la primavera llegará el momento clave de la temporada. Es entonces cuando debe salir el sol para el Barça. Abril está marcado en rojo porque es el momento en el que el Madrid puede fallar. Mourinho sabe que entonces se juega el pan. Tiene cinco partidos de Liga que quitan el hipo (desplazamiento a Pamplona, al Calderón y al Camp Nou y recibe las visitas del Valencia, Sporting y Sevilla). No queda ahí el tema porque además el calendario le marca la disputa de la vuelta de los cuartos de final (si pasa los octavos) y los dos partidos de semifinales (si pasa, claro).

Al Barcelona no le queda otra opción que aguantar hasta entonces. Da igual que Guardiola diga con ironía que la Liga está perdida. Da igual porque no es cierto.

Lo dice sonriendo, con sorna. Solo le faltaba decir “no la podemos ganar porque no nos dejarán disputarla”. Después de ver el partido de Vallecas, Guardiola tiene claro que no solo deberá luchar con el Madrid sino también contra los árbitros. Y así, sin justicia, es muy complicado. Pero no imposible.

Desde el inicio de temporada el Madrid se encuentra con una autopista hacía el título y el Barça sufre en sus propias carnes la lucha en desigualdad. “¿Qué más quieres que te dé, Sandro?” cuentan que le dijo Villar al presidente azulgrana. Nada, casi nada. Solo poder luchar en igualdad de condiciones con los rivales.